lunes, 2 de marzo de 2020

¡Gracias, querido maestro, Ernesto Cardenal...!


Rememoramos aquí 11 años atrás ya las emociones que hace medio siglo nos provocaba leerle sus confesiones de cuando, también él, se anduvo en primeras entregas o compromisos íntimos y sociales (tras haber fracasado con un prematuro levantamiento contra el dictador Somoza, en 1957 ingresó al monasterio de la Trapa como novicio junto al místico activista meditador por la paz Thomas Merton, y se comenzó a sincerar literariamente) aun inmaduro... 


Su necrológica, esta misma semana, resume lo más conocido: 'el sacerdote y gran poeta nicaragüense Ernesto Cardenal (1925-2020) ha fallecido el domingo pasado [...] 
   
El autor de "Epigramas" (1961) fue uno de sus compatriotas más conocidos en todo el mundo, con obras traducidas a 20 idiomas y reconocimientos como la -francesa- orden "Legión de Honor", así como el Premio de Poesía Reina Sofía hispano. 

"Queda todavía por hacer la revolución mundial, que es algo inevitable", dijo entonces (2012).
   


Él mismo llegó a decir que la grandeza de una obra literaria se debía muchas veces, en parte, a sus valores extraliterarios. Mi poesía no tiene verdadera grandeza: su mérito ha sido extra-literario... y éste ha sido el mío, mi dedicación en favor de los oprimidos o pobres; lo que se ha llamado teología de la liberación o para las bases, a la cual me consagré principalmente". 
   
Literato, sacerdote, escultor, pintor, exministro de Cultura con el gobierno sandinista para Nicaragua desde 1979 hasta 1987, místico y muy interesado por la naturaleza, la ciencia o el cosmos. Una de las imágenes más recordadas ocurrió en 1984 cuando fue suspendido "A divinis" por el papa Juan Pablo II al formar parte, durante aquella época, del Gobierno sandinista en Nicaragua, lo que le impidió celebrar misas y administrar sacramentos. 
   

El año pasado, el actual papa Francisco le "absolvió sobre todas las censuras canónicas" luego de 35 años con su sanción tras haber protagonizado una imagen que dio la vuelta al mundo cuando Juan Pablo II reprendió públicamente a Cardenal, quien lo saludaba de rodillas, en el Aeropuerto Internacional de Managua¿El motivo? Su significación política.
   
En aquel entonces Daniel Ortega presidía el gobierno desde un proyecto que despertó el interés de intelectuales nicaragüenses como Sergio Ramírez, quien tiempo después terminaría mostrándose muy crítico con aquél, de nuevo aun hoy presidente de Nicaragua (un país actualmente asolado por la restricción de libertades) y contra el cual Ernesto Cardenal también acabó alzándose opositor sin ambages ante su represión desproporcionada.
“Fue una revolución muy bella, lo que pasa es que fue traicionada. Esto que hay ahora sólo es una dictadura familiar. Y eso no fue lo que apoyábamos nosotrossostuvo él, ya distanciado de Ortega. Figura clave para su entonces "teología de la liberación", el nicaragüense generó polémica dentro y fuera de la Iglesia católica. Siempre, desde sus primeros "epigramas", Cardenal dio a conocer un texto poético preocupado por la condición humana e incorporando concepciones políticas de su realidad sociedad.
   
Repartido entre la contundencia del mundo exterior en su poesía y un sentido del todo, combinó la unión de tradición con originalidad. Y si algo movilizaba o ejerció influencia sobre varias generaciones era el sentido del compromiso político como parte de su actitud vital. Envejeció con la palabra "Revolución" en cada una de sus intervenciones;  algo para él aún "por hacer..." y a l@ que dio vivas, con el puño en alto, desde la catedral de Managua durante los años ochenta del siglo XX.' 

Quedó buen rastro del menos lejano Encuentro en Madrid (2009):
  

2 comentarios:

  1. No sé por qué pero este buen hombre, con su mezcla de resolución más calma profunda e irreverente humor, me recuerda siempre cierta máxima recomendada por uno entre aquellos antiquísimos 7 Sabios de Grecia:

    "Evita, sobre todo, la tristeza; e intenta que tu alegría no sea tampoco un fruto de las circunstancias favorables, sino por ti mismo."

    (Periandro de Corinto)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Quizás explique algo su fidelidad al seguir en la práctica lo que tan bien preconizaba otro de tales 7 Sabios:

      "Busca siempre algún quehacer y, cuando lo tengas, no pienses otra cosa sino en cómo hacerlo bien."

      (Tales de Mileto)

      Eliminar