lunes, 7 de septiembre de 2009

LA GUERRA, donde aún (hoy) combatimos ...

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Desde aquel mismo Septiembre de 2001 ya veníamos clamándolo algunas personas -invariable mente- a propósito del Vietnam-ISTÁN... al que nos hunden los Bush, Aznar, Serra, de Palacio, Solana, Cascos, Zapatero, de la Vega, Bono, Alonso, Chacón, Moratinos, Obama, Hillary Clinton... y demás: "¡Con la Guerra y el Terror NO se construye la Paz!", dijo nuestro primer Manifiesto, entonces minoritario... Pero ahora, cuando el mismo terror de Al Qaeda que se vengaba en Madrid el 11-M de 2004 toma tres nuevas "víctimas por Al Andalus castigar", quizás lo vayan comprendiendo más =

“Cuentan que Johnson visitó en un hospital a MacArthur. El vencedor del Japón le rogó al presidente que no volviera a enviar nunca soldados a Asia. La petición llegaba tarde: ya estaba en marcha Vietnam, la guerra la perdió el tigre de papel. Al final se avergonzaron de sus muertos; todo quedó explicado en una lápida blanca y la foto de las madres tirando los bebés sobre las alambradas de la embajada para que se fueran en helicópteros.

Hay un tambor de Oriente que nunca deja de sonar y el eco va de los arrozales a las amapolas; ahora los kalashnikov con ojos, los suicidas con el catecismo coránico preparan 'un segundo Vietnam' entre el opio. Zapatero ha decidido enviar 200 soldados más a Afganistán. Ya van 1.000. Rajoy ha exigido al presidente que vaya al Parlamento a redefinir la misión, a explicar por qué estamos siendo arrastrados a una guerra sin frentes donde ya se hundió el Ejército Rojo. Cuando lleguen más ataúdes de guerra televisada a la base Cuatro Vientos, el presidente deberá explicar a qué fuimos allí y por qué esta guerra es más justa que la de Irak, que lo llevó de pancartas a la Presidencia.

Aunque, como escribió Flaubert, soy más modestamente un místico que no cree en nada, le tuve y aún le tengo respeto a Zapatero: ensanchó las libertades civiles, disecó la charca de la corrupción. Pero de un tiempo a esta parte se ha convertido en el primer sembrador de melones, el timonel que recolecta los votos en un bonapartismo sonriente. Ha olvidado que Moncloa no es la Casa Blanca, aunque los dos edificios estén edificados sobre el fango, y no es presidente de la nación sino jefe de Gobierno de una exigua mayoría parlamentaria. Dentro del partido su liderazgo de mercadotecnia no está basado en el consenso de las familias y fracciones, sino en un creciente culto o miedo a su personalidad. Es sabido que decapita con buena educación, purga a dinosaurios y devora a 'la nueva vía'. Ha cortado el pescuezo a sus 10 contables; ahora, como decían los carteles, puede llegar a comandante de un batallón de turbantes, catalanes en secesión y 6.000.000 de parados.

Cuenta Plutarco que siendo joven fue enviado con otro compañero como embajador a un procónsul; habiéndose quedado retrasado el otro por alguna razón, fue solo a entrevistarse. «A mi regreso, cuando me disponía a informar de nuestra embajada, se levantó mi padre y, tomándome aparte, recomendó No digas ‘marché’ sino ‘marchamos». La división de la mano en dedos no la debilita, y así el político, que reparte el poder, hace su acción más eficaz. Por el contrario, el que toma sobre sí la nación como un saco de serpientes, como una mortaja, devorando a los colaboradores, no tiene excusa si se equivoca.”


1 comentario:

  1. ¿Cuántos meses faltan para que aquí vuelva el PSOE a refrescar sus pancartas Contra la Guerra? Pues hasta que pierda el Gobierno nada de nada...

    ¿Cuándo comenzará el Gobierno actual a reconocer que resulta suicida (para sus expectativas electorales a medio plazo) el no salirse de VIETNAMISTÁN, como hoy vemos que ya empezó a debatirse por los otros países de la 'Coalición internacional' armada desde la Casa Blanca? En días inmediatamente previos a una Campaña para siguientes Elecciones Generales...

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