martes, 7 de julio de 2020

PÓKER DE SOTAS... en la escena española

  
Sin duda merecerá la pena ponerse a desentrañar las, para nada en demasía velables, claves entre aquello que -sobre nuestras cabezas, aquí ahora, y como prioritario...- se cuece desde supremas alturas: "Felipe Glez lleva una semana calladito, después del 'recado' que le manda el presidente Sánchez por medio de su bufón convertido en el monigote del pim-pam-pum, que amagó con una investigación al jefe del GAL.

Entre las locuacidades y el mutis, se ha producido una convocatoria del Consejo de Seguridad Nacional presidido por la 'autoridad militar competente' como colofón del Estado de Alarma. De resultas de la cual se ha declarado una tregua, en la lucha encarnizada sobre la forma de gobierno: o coalición o concentración, o vaya usted a saber... Aunque el armisticio no significa el final de las hostilidades.

Desde antes de la formación del gobierno de coalición, Glez intriga día sí día tan bien, para bajarle los humos y el mando al presidente del gobierno; siendo su planteamiento tan claro como interesado: tienen que entenderse socialistas más conservadores para que sus 'negocios' y tejemanejes no resulten perjudicados.

Para llevar a término su propósito, Glez dispone de un PÓKER DE SOTAS instalado en el gobierno a batir.



No pasó desapercibido que la rebeldía está encabezada por una superjuez que, si no propició, al menos contemplaría complacida la revuelta en una de las patas del ministerio de interior. A modo de cabecilla, sin llegar hasta postularse públicamente, se dejaría querer; para ser aupada en su caso a la presidencia con apoyo derechista, incluido la parte ultra. Las otras tres, serían sin duda:

Una, más conocida como 'bacigalupa', con quien el monigote de Sánchez se las tuvo tiesas a propósito del supuesto 'comité de reconstrucción', donde al socio de gobierno se le dejó fuera.

Luego está la que vino para quedarse en el AVE de Sevilla, con artilugios y abalorios de trilera en la maleta. Y por fin, mas no menos importante, esa pieza de porcelana a juego con el 'jarrón chino'... que como se tropiece se rompe; presume de alta funcionaria europea y no deja de ser la hija de su padre, maestro de ceremonias en la televisión felipista.

Esta última, de momento, pese a su 'nadiedad', es quien está llamada a jugar un papel decisivo en los acontecimientos que se desarrollan entre bambalinas.

Hete aquí que, por apartar a la cabecilla del mando sobre las tropas, al presidente y su consejo áulico se les ocurriera u ocurriese promover para dirigir la OMC a la titular de exteriores; puesto que sería o seriese okupado 'sin desdoro' por aquélla, que ya estuvo en funciones durante el gobierno anterior, cuando se mandó al 'borrell-cuidado-con-él' a los confines de la Unión Europea.

Pues bien, para contrarrestar el supuesto plan, el póker de Glez tiene una carta en la manga que pasaría por colocar a la muñeca de porcelana al frente del Eurogrupo; de manera que, en caso de tener éxito, se caen la candidatura de la ministra exterior y los anhelos del presidente

Habrá que permanecer con mucha atención al desarrollo del duelo, manteniendo las formas, porque estamos en medio de una tregua técnica...

Y sin descartar que haya RE-PÓKER."
JoseM LArri



Tal avisad@ Garganta Profunda que -muy 'prima facie', con datos manejados por zahurdas, 'bodeguiyas' o/y cloacas...- del Poder realísimo ahora, tan oportuna mente, nos alerta publicó varias otras filtraciones preparatorias... antes en un medio 'filosocialprogresista crítico'; pero, sin embargo, ni ahí se ven prestos a tirar de la manta descubriéndonos cuent@s del más candente 'retablo de las maravillas' aun hoy mismo ya...   


   
   

sábado, 4 de julio de 2020

LA CASTA QUE MANTENEMOS, AQUÍ HOY, COBRANDO TANTO POR NO CUMPLIRNOS

   
Al parecer, en estos meses de 'Alarma', los diputados del Congreso se han embolsado unos 2.000.000 de euros por dietas de asistencia. La cifra corresponde a la suma de los emolumentos de casi todos ellos, pues hay que salvar el caso de Odón Elorza, que renunció a cobrarlos. Sorprende tal honradez en este diputado vasco cuando todos los demás colegas han prescindido de su anómala circunstancia del que el Congreso suspendió los trámites parlamentarios el 10 de marzo y no los reanudó hasta mediados de abril. Vamos, que se cerró a cal y canto, salvo para convalidar los decretos-ley del Gobierno. 

Y luego se reanudaron las comisiones y plenos con una presencia mínima del apenas 10% de sus señorías. Así que, para la mayoría de los diputados, de asistencias nada de nada: sólo han cobrado las dietas por el morro, aunque ahora digan que, con ellas, van a hacer donaciones a ONG's y cosas por el estilo. 

En realidad lo suyo ha sido una Regulación [suspensiva] Temporal del Empleo, de manera que si hubiese habido un tratamiento parejo al del resto de las «personas trabajadoras» -utilizo la jerga que han plasmado en el BOE Sánchez y sus colegas- estarían cobrando el 70% de la base reguladora con un máximo de 1.411,83 € si tuvieran 2 ó más hijos. Pero ya se sabe que, en España, siempre hay quien es más igual que los otros; y si no, que se lo digan a vascos y navarros que, desde Lope de Aguirre, siempre han creído que «el que no vale más que los demás, no vale nada».


Pero no nos desviemos de lo esencial, porque esos millones son sólo peccata minuta frente al descontrol político del Gobierno en tiempo de coronavirus, pues para eso ha servido el cierre del Congreso.

Por cierto que esto se lo debemos a Vox y sus contagios del 8-M, porque sus 52 diputados decidieron ausentarse de la Cámara y exigieron «la suspensión de las sesiones» hasta que la epidemia estuviera dominada.

Ya se ve que ni los de este partido ni la presidenta Meritxell Batet se han debido leer ese párrafo de la Constitución que obligó al que el funcionamiento del Congreso no pueda interrumpirse durante los estados de alarma, excepción y sitio, precisamente para que puedan escrutarse las acciones del Gobierno. 

O como dijo el Tribunal Constitucional con más solemnidad, para que ejerza «un control político o de oportunidad sobre la declaración del estado excepcional y las medidas adoptadas al respecto; así como subsiguientemente la puesta en marcha, en su caso, de los pertinentes instrumentos de exigencia de responsabilidad política». Ahi queda eso.