Recordemos: ¡buena nueva! La belleza solo se podría encontrar en los ojos de quienes miren

  

Con permisos especiales del amigo -genial, siempre- Krahe... [mas disintiendo en cambio por una vez, tan contraria mente, respecto a lo muy ultimísimo (propinado desde Prisa) bajo firma de otro colega común (pero nada menos viejo ya, y perjudicado hasta parecer añorar pretéritas votaciones obligatorias, contra las que otrora se rebeló) como el buen Sava...], libérrimo, recitémoslo:

     

"¡También habrá que saltar a la pata coja, habrá que coleccionar sellos de Nigeria (no todo va a ser votar, no todo va a ser votar)... Y habrá también que apretar una tuerca floja o habrá que ir a trabajar (no todo va a ser votar)... por una miseria.

     

Los amantes del círculo polar... (según Julio Medem)

   

Habrá también que llevar a arreglar el coche, o habrá que quitarle el polvo a la biblioteca (no todo va a ser votar, no todo va a ser votar)... Pues habrá que cerrar el bar al morir la noche y habrá también que pagar (no todo va a ser votar)... lo de la hipoteca. No todo va a ser votar, ya revotaba el año pasado a la orillita del mar con un@s list@s sin par, y después me dieron de lado; lo recuerdo, algo tocad@, pero sin dramatizar (no todo va a ser votar, no todo va a ser votar).

 

También habrá que llamar a la pobre Alicia, habrá que modificar la ronda nocturna (no todo va a ser f@llar, no todo va a ser f@llar)... O habrá que desmenuzar la última noticia y habrá que depositar (no todo va a ser f@llar)... el voto en la urna.

  

Desde ya multiseculares patios de Toledo...

  
Habrá también que comprarse unos calcetines, también habrá que regar esos 4 tiestos (no todo va a ser votar, no todo va a ser votar)... Y habrá que documentarse sobre los delfines o habrá también que firmar (no todo va a ser votar)... muchos manifiestos. No todo va a ser f@llar, ya lo hacías el año pasado a la orillita del mar, con un@s list@s sin par que luego te dan de lado; te acuerdas, y hasta trastornad@, pero sin exagerar (no todo va a ser f@llar, no todo va a ser f@llar).

   
También habrá que invitar a alguna barbacoa, y habrá también que llegarse hasta el 5° pino (no todo va a ser votar, no todo va a ser votar)... Habrá que intentar cruzar Núñez de Balboa o habrá que ir a consultar (no todo va a ser votar)... a un buen otorrino.

  

También habrá que admirar a la mona Chita, habrá también que jugar a pares o nones (no todo va a ser votar, no todo va a ser votar)... Pues habrá que resucitar por la mañanita y habrá también que cantar (no todo va a ser votar)... muchas más canciones. No todo va a ser votar, ya f@llamos el año pasado a la orillita del mar, con un@s list@s sin par que después nos daban de lado; lo recordaremos, obsesionad@s, pero sin llorar (no todo va a ser votar, ni todo va a ser f@llar)!"

  

Entre las nubes, por el capitalino Barrio de las Letras...

   

En fin, volvamos al caso con el Sabio querido profesor que mejor nos lo había explicado: "Tres pasiones simples pero poderosas han dominado mi vida: el anhelo del amor, deseo de saber y compasión abrumadora por sufrimiento en la humanidad (...)

      

El amante, poeta o místico encuentran una satisfacción más plena que cuantas al deseoso de poder le cabe conocer nunca, una vez consigue retener los objetos de su amor; en cambio, el deseoso del poder deberá estar constantemente ocupado con alguna nueva manipulación, si no quiere sufrir por un sentimiento de vacío.
   
Cuando el momento de morir me llegue sentiré no haber vivido en vano. He visto la tierra enrojecerse al atardecer, el rocío centelleando por la mañana y la nieve brillando bajo el frío sol; he sentido el olor de la lluvia después de la sequía y he oído el tormentoso Atlántico golpeando las costas graníticas de Cornwall.

  

'Cinque terre', junto al súper-Puerto de La Spezia, en Liguria

  

Hoy la ciencia puede conceder estos y otros goces a más gentes de las que, por otro modo, podrían también disfrutar con ellos; y si así lo hace, su poder será utilizado bien, sabia mente... Pero, cuando a la vida le arrebatan precisamente aquellos momentos a los cuales deben su valor, las ciencias ya no pueden ser dignas de admiración, por muy inteligentes y elaboradas que sean para conducir a los hombres por el camino de la desesperación”.

('The Scientific Outlook': Bertrand Russell, 1931)