domingo, 15 de noviembre de 2020

Cosa por su nombre: 'dictadura constitucional'




"Durante la última de las sesiones de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, alguien le mencionó la bichaPedro Sánchez aludiendo a la “dictadura constitucional”. La reacción del presidente evidenció su ignorancia supina en la materia jurídico-política cuando le espetó al diputado interpelante que 'de ninguna manera una dictadura podía ser constitucional por existir una contradicción entre ambos dos términos'. 

Tal vez él lo crea así, pues no parece percatarse de que, en su último decreto de alarma, lo que verdaderamente ha establecido es una dictadura constitucional que acaso pudiera servir al propósito de atajar la epidemia de coronavirus –aun cuando nada lo garantiza–, pero lo que sí es seguro es que nos cercenará algunas de las libertades y derechos fundamentales de los españoles.

Este concepto de dictadura constitucional ya lo empleó Carl Schmitt para designar la situación a la que podía conducir el artículo 48 de la Constitución de Weimar, que concedía al presidente del Reich alemán el poder de “suspender en todo o en parte los derechos fundamentales” cuando estuviera en peligro la seguridad o el orden público; una situación de excepción que, de hecho, podía instituir una dictadura en manos del canciller. 

Es decir, una dictadura derivada del ejercicio mismo de los poderes constitucionales cuando éstos tomaban la decisión de provisionalmente eliminar libertades públicas y el control del Gobierno por el Parlamento y los tribunales. 

Schmitt escribió en 1925: “Ninguna Constitución de la tierra había legalizado tan fácilmente el golpe de Estado como la de Weimar”. Luego el ascenso de Hitler al poder en 1933 –cuando el 30 de enero el presidente Paul von Hindenburg le nombró canciller y dos meses más tarde el Reichstag aprobó la 'Ley para el Remedio de las Necesidades del Pueblo y del Reich'– permitió constatar que, en efecto, Carl Schmitt había acertado en su pronóstico.

Una dictadura constitucional ahora es lo que propone y dispone Pedro Sánchez con su declaración del 'estado de alarma'. Una declaración que otorga a su Gobierno el poder de legislar al margen del Parlamento, regulando hasta el mínimo detalle la vida de los españoles –como ya ocurrió durante el estado de alarma anterior– y cercenando sus libertades de manera generalizada (sin considerar el límite que imponen las leyes sanitarias al autorizar la restricción de los derechos individuales sólo a las personas contagiadas o que hayan tenido un estrecho contacto con éstas). 

  

Y ahora con el agravante de haber suprimido el control parlamentario de la acción del Gobierno durante 6 meses –lo que choca frontalmente con el mandato constitucional de que sea el Congreso de los Diputados quien, cada quince días, decida acerca del mantenimiento de la situación excepcional– y también el de los jueces ordinarios; pues la naturaleza de la norma obliga a que el control jurisdiccional lo ejerza el Tribunal Constitucional. 

El remedo de que el presidente vaya por el Congreso un rato cada dos meses -para charlar del asunto...- no es un verdadero control parlamentario, pues se ha eludido la posibilidad de realizar cualquier votación que pudiera retirar al Gobierno los poderes de excepción adquiridos con la alarma.

La anterior experiencia del confinamiento ya preludiaba este abuso de poder actual, pues fueron numerosas las intervenciones gubernamentales que cercenaron los derechos de circulación y residencia, la libertad de expresión, el derecho de reunión pacífica y sin armas, la libertad de empresa y el derecho a la negociación colectiva. Pero lo que ahora se produce es un salto cualitativo de imprevisibles consecuencias. 

La dictadura constitucional es un hecho que emerge de la aprobación misma de la renovación del estado de alarma por parte del Congreso. Éste se conforma a ser retirado de sus funciones de control del Ejecutivo y, de esta manera, otorga al Palacio de la Moncloa un poder que se asemeja al que, en otro tiempo, se ejerció desde el Palacio de El Pardo. 

Pedro Sánchez debiera haber aprendido que las dictaduras no siempre se derivan de una guerra y que sí es perfectamente posible que, tergiversando y retorciendo la Constitución, sea ésta la que aparentemente las ampara. 

Alguien señaló hace unos meses que el presidente del Gobierno tiene vocación de autócrata. Ahora lo estamos constatando sin la menor duda. Ojalá que ya no sea demasiado tarde."

(Mikel Buesa, 29.10.2020: 'Dictadura constitucional')  



2 comentarios:

  1. JÓDAR (JAÉN), 2 Nov. (EUROPA PRESS) -

    La familia de Cristóbal Montavez, de 42 años y quien ha sido encontrado muerto en la madrugada del viernes 30 de octubre en el calabozo de la Policía Local de Jódar (Jaén), ha denunciado delitos de detención ilegal, homicidio, destrucción de pruebas y obstrucción a la justicia en las circunstancias en que se produjo su muerte, según la versión de la Policía, un suicidio.

    Como relata su padre en la denuncia, presentada el mismo viernes en el Juzgado de Instrucción de guardia de Úbeda (Jaén) y consultada por Europa Press, Cristóbal salió por la tarde del jueves para hacer deporte, dar una vuelta con ropa deportiva y sobre las 23,10 horas llamó para decir que ya regresaba, pero que se había encontrado con unos amigos y se iba a entretener, por lo que sus padres se acostaron antes de su regreso.

    La siguiente noticia que tienen es al día siguiente al despertarse a las 8,00 horas, cuando se persona en su domicilio la Policía Local para informarles de la muerte de su hijo, al ser encontrado en el calabozo ahorcado con el cordón del pantalón de chándal, después de haber sido detenido por la noche por saltarse el toque de queda, protagonizar desórdenes públicos y tras forcejear con los agentes en el momento de su arresto.

    La familia no se cree esta versión. Su hermana, Loli, relata que los amigos que estuvieron con él dicen que estaba bien, "tranquilo". Asimismo, subraya que su hermano no tenía problemas de drogas ni ninguna enfermedad mental que de credibilidad al forcejeo en su detención. "Una persona querida" en el pueblo, añade.

    Ella explica que una de las cosas que más dudas les generan es que no les dejaron ver el cuerpo de su hermano antes de llevarlo a Jaén capital para hacerle la autopsia y el tiempo transcurrido entre su detención y su traslado. "Lo detuvieron a las 23,40 horas", por lo que el suicidio "tiene que pasar sobre las 1,30 o 2,00 horas", y "a las 4,00 horas ya habían hecho todo, se supone que ya habían hecho levantamiento del cuerpo, forense, policía judicial y eso no se hace en media hora, ya tendría que haber pasado por lo menos una o dos horas".

    Los plazos de tiempo no le cuadran a Loli, que insiste en ello. "A las 4,00 horas ya salía la caja (el ataúd) por la puerta del Ayuntamiento, que ellos mismos llamaron a la funeraria, y hasta las 8,00 horas no se nos comunica absolutamente nada".

    Este último argumento asegura que lo han confirmado tras preguntarle a los empleados de la funeraria Cristo de la Misericordia de Jódar, la que procedió con el traslado a Jaén y el entierro de su hermano ya el sábado por la mañana.

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    1. EL PANTALÓN, "LO HABÍAN TIRADO"

      En la denuncia, la familia censura que la funeraria les entregó el viernes el cuerpo del fallecido, "sin que conste previa autopsia, ni consten diligencias de levantamiento del cadáver por parte del Juzgado de Guardia". Es decir, que "se habrían contravenido todas las disposiciones previstas en la Ley para un caso de muerte violenta como en este caso".

      También se dice que la funeraria pretendía que el entierro fuera el mismo viernes por la tarde, pero finalmente se fijó para el sábado a las 11,00 horas, "encargándose ellos de todos los trámites en lugar del Juzgado de Guardia", por lo que piden que se tome declaración a los empleados de la funeraria para "que informen de quién han venido recibiendo órdenes, quién los avisó, la hora del aviso y qué gestiones se han hecho tanto por la funeraria como por la Policía desde que se hicieron cargo del cadáver".

      Otro de los puntos más extraños para la familia es cómo se produjo el suicidio. Según asegura Loli, "se supone que le quitaron zapatillas, cordones, todo, ¿con qué se ahorcó?".

      En la denuncia señalan que a las 11,15 horas del viernes les hacen entrega de los efectos de su hermano: unas zapatillas marca Adidas, teléfono móvil, cartera y papel de liar.

      Así pues, preguntados por sus ropas y concretamente por el pantalón del chándal amarillo y negro marca Adidas que llevaba cuando salió de casa", les informan que "se lo han tenido que quitar porque estaba manchado y que lo habían tirado".

      Además, según explica la hermana, tras la detención violenta de su hermano, él y los dos policías que lo arrestaron fueron al centro de salud para que recibir atención médica. Posteriormente, se fueron al calabozo.

      En la denuncia señalan que cuando procedieron a reconocer el cadáver, "tenía los ojos morados, con síntomas de haber sido golpeado", y la policía les ha reconocido que "tuvieron que reducirlo con violencia". Sin embargo, los familiares fueron al centro de salud y a preguntas de si el médico observó si tenía los ojos morados, les dijeron que "no lo sabían, pero que a lo mejor se lo había hecho él después", y a continuación se suicidaría.

      Entre otras cosas, la familia pide que se libre oficio al Colegio de Abogados de Jaén para que informe por escrito, aportando pruebas de registro de llamadas con la hora exacta y los teléfonos implicados, de la hora en que se llamó solicitando abogado de guardia con motivo de la supuesta detención; y que se incorporen las ropas del finado al sumario, y sean analizadas, con expresa búsqueda del chándal amarillo y negro marca Adidas y su cordón de ajuste a la cintura, y se analicen con pruebas de ADN para comprobar que eran las suyas.

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