viernes, 31 de marzo de 2017

'Más cornadas el hambre' da, por desigualdad creciente, que nos recorta 'esperanzas de vida'

    
Como habíamos recordado ya con recientes datos del INE, toda precariedad socioeconómica es factor de riesgo grave para la salud: en Barcelona, por ejemplo, los barrios ricos llegaron al tener vida media 11 años mayor que barriadas más pobres. Y desde la prestigiosa revista médica 'Lancet' se acaban de publicar estudios nuevos ratificando lo mismo.
     
Sin embargo, en este Reino de España (y la UE) los fríos hechos -nada desmentibles...- nunca se ven mejorados, al respecto; y así, según diversas estadísticas internacionales reconocidas muy solventes: porcentajes para los hogares que no cuentan ingresos ninguno creciendo siguen, desde hace una década, casi triplicando ya sus valores de hace 25 años.
 
Muy escandaloso es cómo desde 2007 mientras tanto se han más-que-duplicado patrimonios, tanto de los 200 mayores capitalistas como para las Bolsas totales en España (si bien, por poner ejemplo, Amancio Ortega multiplicó su fortuna por 6, entre 10.700 y 67.650 millones de euros)...
  
       
Entre toda la OCDE durante los últimos años, lo peor, como promedio: las rentas laborales más Altas han tenido su evolución menos favorable para Grecia (-10%) y España (-5%); la renta laboral Mediana registró su variación más desfavorable para Grecia (-12%) y España (-6%); las rentas laborales Inferiores van sufriendo su variación más negativa para la península ibérica: Portugal (-20%) y España (-15%)
    

 
Por fin, seguimos batiendo récords en cuanto a nuestra Desigualdad económica (medida con el índice Gini, para dicha OCDE y sobre toda la Unión Europea), según valores absolutos e incluso respecto de sus evoluciones últimas...
       
 
  
¡Para nada se ha visto ningún avance aun, traducido en el ponerle frenos a suicida tolerancia general, ante tal lacra colectiva! ¿Cuándo aplicaremos lo Mínimo, de Renta Básica? Sería ya hoy claro: probadamente factible...
     
   
Somos los primeros en 'corrección política' perorando de Ministerio, Consejerías, Concejales, Leyes o Políticas para la 'Igualdad'... mas los últimos a las horas del reducir -eficaz mente...- las Desigualdades. Y un motivo está ya claro, como nos lo explica el prof. Vicenç Navarro, muy bien:
 
La transición al capitalismo desde lo que se llamó el ‘socialismo real’, y las enormes desigualdades creadas entre tal proceso, costaron más muertos que los causados por las Guerras [Calientes] de Irak y Siria juntos. Solo en 1990-95, llegó hasta casi 2 millones el aumento en muertes para lo que fue la URSS. Y durante toda la década de los años 1990 fueron 4 millones, algo consecuente al enorme crecimiento en las desigualdades causadas por aquella transición (que literatura científica documenta extensamente: V.M. Shkolnikov y G.A. Cornea: ‘Population Crisis &Rising Mortality in Transition Russia’The mortality crisis in transitional economies’- Oxford University Press, 2000).
  
Mientras alguna ‘esperanza de vida’ para personas con elevadas rentas o superiores niveles educativos aun continuó creciendo en lo que había sido Unión Soviética, entre las clases populares de aquel país la mortalidad ha sufrido elevadísimos incrementos como resultado de sus políticas públicas hacia masiva privatización a los medios productivos mayores y destrucciones de la protección social, que incrementaron espectacularmente desigualdades sociales. Esta realidad apenas ha sido reflejada en los mayores medios de información del mundo occidental, ¡aunque no hay duda de que si le hubiera ocurrido a un país para el que la transición hubiese sido del capitalismo al socialismo, tal hecho hubiera sido notición del siglo!
  
Pero tan enorme coste humano con el neoliberalismo aparece también dentro del propio ‘capitalismo real’ (…) esperanza de vida ha ido empeorando para la clase trabajadora blanca en EE.UU. Y, como consecuencia, las esperanzas de vida promedios entre toda su población se han estancado, dejando de crecer. Todo ello a la vez que políticas antidiscriminatorias federales, intentando corregir las desigualdades por raza y de género, se desarrollaban o establecían; lo cual parecería ser paradójico, pues al tiempo que se intenta favorecer a los grupos discriminados entre la sociedad (por lo tanto más vulnerables) habrían ido deteriorándose calidades de vida, bienestar y salud en las clases populares…

  
  
Sin embargo, esa paradoja queda clara viendo cómo para diseño y aplicación de dichas políticas antidiscriminatorias no se tuvo en cuenta la categoría de ‘clase social, centrándose sobre ‘raza o género’, tan sólo. Como consecuencia, los grupos que se han beneficiado más por tales políticas antidiscriminatorias han sido pertenecientes a las clases de rentas altas y medias-altas. La estructura de poder ha cambiado, diversificándose sus colores y géneros (es decir, hay más mujeres, afro-americanos, latinos y mujeres hoy), sin que haya beneficiado ello sustancialmente a las clases populares (incluidos aquellos grupos discriminados, cuyas mayorías están en ellas incluidas, también)…
  
Las políticas públicas de la candidata demócrata Hillary Clinton iban en esa dirección: el hecho del que su campaña fuera sin promover política pública centrada en la clase social -como un sujeto de intervención- explicaría por qué unas mayorías de mujeres entre las clases populares tampoco votaron dicha candidatura, haciéndolo a los candidatos Sanders y Trump, quienes enfatizaron esos discursos clasistas (aparte de razas o géneros) aun cuando el uso de dichas dos categorías fuera diametralmente diferente u opuesta entre ambos rivales.
 
Una segunda dimensión en la desigualdad, además de cualquier discriminar, sería su Explotación (concepto del cual los beneficiarios por tal orden ni oír hablar quieren jamás; y ello a pesar de cómo sumamente fácil es del detectarse: el sujeto A explotó al B si él vive mejor a costa de que lo haga peor ése; siendo las diferencias entre A y B de clase social o género y raza, nación u otra cosa cualquiera).
 
Por poner ejemplos, en Catalunya se vio un descenso sobre la esperanza de vida para las tasas del crecimiento, al estallar su Gran Recesión; lo que sucedió desde 2007: realmente, la tasa de mortalidad creció un 10%, pasando de 7,98 a 8,77 defunciones por cada 1.000 habitantes entre 2010 y 2015 (cuando había descendido durante los años anteriores). Y otra situación semejante ha ocurrido con el promedio para España, tanto en descenso respecto a la tasa incremental sobre las esperanzas de vida como al aumentar sus mortalidades.
 
Estos cambios han ocurrido a la vez que aumentaban las desigualdades de mortalidad, entre ciudades (con distintos niveles económicos) y barrios (también de niveles económicos diferentes) dentro de las mismas. Por Catalunya, la diferencia en esperanzas de vida entre ciudades con elevada renta -cual Sant Cugat del Vallès- era 8 años más que para las otras -como El Prat de Llobregat o Sant Adrià de Besòs- del cinturón (obrero) junto a Barcelona... Y sobre la misma capital, los barrios con superior renta -como Pedralbes- registraron durante 2009-2013 esperanza de vida 11 años mayor que otros –obreros del tipo Torre Baró, por ejemplo, para las más bajas- en toda el Área Metropolitana barcelonesa.
   
    Postdata, de 3 días después: 

viernes, 24 de marzo de 2017

Sobre la imaginación Creadora -o sea, JAYAL...- del "Sufismo" como una fuente... de inspiración


Nos ilustraron desde la madrileña Casa Árabe mediante una oportuna exposición -de musicalidades varias e imaginería imperdible- con texto, comisariado por Pablo Beneito, junto a Nuria Medina o Elena González y Lorena López:
 
Derviche gira en danza ritual: 'Mevlevi' (2008), Isabel Muñoz
  
EL ORIGEN DE LA PRÁCTICA SUFISTA SEGÚN LOS SUFÍES
 

El sufismo, por sus textos clásicos, se plantea como iniciación a un conocimiento transmiti­do 'de corazón a corazón' en modos diver­sos y complementarios. Por un lado, su inicio espiritual se hace remontar al origen de la humanidad, incidiendo en el carácter atem­poral y universal de su esencia. [Según el Corán, Aláh creó al padre  Adán a su imagen y “enseñándole la totalidad entre los nombres”.]

De ahí surge el primer sufismo que, a partir de entonces, en diversas modalidades, habría sido siempre la vía de realización interior por excelencia de las sucesivas actualizaciones del mensaje divino. Por otro lado, los sufíes consideran que su pri­mer y decisivo transmisor en la hégira islámica (aunque el sufismo aún no recibiera este nom­bre en ese momento), habría sido el propio profeta Mahoma, fundador del islam.
 
De hecho, todas las cadenas o linajes de transmisión de la iniciación en el seno de las vías (tariqas) se remontan a dos de sus íntimos allegados y sucesores al frente de la comuni­dad: Abu Bakr y, sobre todo, Alí... El sufismo histórico ha empezado a documentarse a finales de siglo VIII ya y se va consolidando desde los prin­cipios del IX por Oriente Medio.
 
Después siguió expandiéndose y manifestándose de modos distintos o adaptados a diversos tiem­pos y entornos por todo el mundo islámico hasta lo actual. Hoy en día el sufismo constituye una de las principales vías para la en­señanza espiritual por el mundo. A través de diversas hermandades u órdenes, que se presentan a la vez como fruto y vehículo de transmisión, el sufismo está en diálogo creati­vo con otras formas de la espiritualidad.
 
    
DIMENSIONES INICIÁTICA Y MÍSTICA
 
Se llama sufismo (del árabe tasawwuf) a una dimensión del místico islam, de carácter iniciá­tico, y particularmente desarrollada en el ámbi­to sunní, dado que otros -chiítas- ya conllevan sus propias modalidades de mística e iniciación. Existen además hoy formas para las espiritualidades de inspiración sufí no estricta­mente vinculadas a la práctica religiosa del islam.
 
En general, el tasawwuf, como modo de mística espiritualidad propio del conjunto del islam y una expresión de su interio­rización más contemplativa, puede acompañar, sin carácter propiamente iniciático, las prácticas para todo musulmán. Ibn Arabi (1165-1240) explica -con Terminología sufí- cómo el tasawwuf se da en unas prácticas de cortesía espiritual y adoptándose los nobles rasgos del carác­ter expresados por aquellos 'nombres divinos' que habría transmitido la revelación.

  
En sentido más específico, se llama sufismo al conjunto de corrientes de carácter místico (entre las cua­les se cuenta, por ejemplo, la tradición de la futuwwa o caballería espiritual, tanto árabe como persa, práctica del altruismo y la inte­gridad) que, de un modo u otro, se adscriben a esa tradición iniciática distintiva, en la cual resulta determinante la relación entre el maes­tro (shayj) y el iniciado como vía de aperturas a la gracia o el conocimiento del propio ser esencial, velado por apegos y ataduras del yo inferior que la compañía u orientación de un guía realizado ayudó a revelar y disolver.
   
El tér­mino sufí puede aplicarse a cuantos participan del ámbito con referencias propio del sufismo, pero más propiamente designando a quienes han realizado internamente las vivencias de amor que lo caracterizan, aquellos maestros, gnósticos o conocedores respecto a los misterios de la Unidad...
 
A los que inician su andadura en el sufismo más bien se les llama "derviches" ('fuqará' y 'muridún'), es decir, mendicantes, po­bres o aspirantes, para incidir en el estado de necesidad que conlleva su condición de pere­grinos (salikún) y humildes buscadores.
  
Caligrafía (Munir al Shaarani-Grande)

 
LA DIMENSIÓN POPULAR
 
En sucesivas oleadas, desde los siglos XIII-XV hasta la llamada renovación de las órdenes durante los siglos XVIII / XIX, el sufismo expándese por todo el norte de África, Orien­te Medio, Asia Central, sudeste asiático, etc. Desde Mindanao a Bosnia y de Senegal a Sin­kiang, el sufismo se había convertido en un fenó­meno de alcance universal.
 
En nuestro tiem­po, en buen número de países musulmanes como, por ejemplo, Marruecos constituye un trasfondo esencial para la identidad e incluso de las estructuras políticas o culturales; considerándose su expresión de un islam autóctono, tradicional, popular y más dialogante, frente a otros discursos de naturaleza rigorista como el wahabismo.
    
El sufismo, al poner énfasis en la experien­cia personal directa de los estados interiores y las realidades espirituales, propicia particu­larmente una interpretación abierta, inclusiva y tolerante del islam…
 
  
EL SUFISMO, DESDE AL-ÁNDALUS HASTA ESPAÑA HOY
  
En lo andalusí hallamos evidencias de la permanente interacción de las corrien­tes espirituales del islam. El primer gran sufí de al-Ándalus cuyas obras nos han llegado, Ibn Masarra de Córdoba (m. 931), se mues­tra vinculado al oriental Tustarí o a Dunnún de Egipto (s. IX). La original obra de Ibn al- Aríf (m. 1141) de Almería dialoga con la de Ansari de Herat (m. 1088).
  
Desde la Sierra nuestra del muy morisco Saqura... entre Jaén y Albacete
 
Más adelante, Abu Madyan de Cantillana (m. 1198), y tras él Abu­labbás de Murcia (m. 1287) y ash-Shadili (m. 1258), darán lugar a la expansión de modali­dades de sufismo andaluso-magrebí hacia el oriente. Estos grandes exponentes muestran que nuestra Península Ibé­rica fue un espacio de encuentro fértil para científicos y pensadores o místicos que han dejado un legado universal.
 
Ese sufismo andalusí culmina con Ibn Ara­bi de Murcia (m. 1240), el exponente más in­fluyente del sufismo hasta la actualidad, que tan profunda repercusión tendrá con su doc­trina de la Unicidad Esencial del Ser, tanto en el mundo árabe como en los ámbitos turco y persa o en el subcontinente asiático.
 
Durante las últimas décadas se ha ido creando, en España y otros países, un clima receptivo a las grandes obras de los sufíes (como El lenguaje de los pájaros de Attar, el Masnavi de Rumi o Los engarces de la sabi­duría de Ibn Arabi) y al sufismo vivo de muy diversas escuelas…
 
   
BÚSQUEDA DEL CONOCIMIENTO: HACIA REALIZACIÓN DE LA UNIDAD Y EL AMOR
 
“Quien se conoce a sí mismo, conoce a Su Señor” (Hadiz)
.
El islam prescribe la búsqueda del conoci­miento como orientación vital. Según un ha­diz, Dios afirma: “Yo era un oculto Tesoro y quise darme a conocer. He creado al ser humano para que se Me conozca”.

Para los sufíes, conocer al Creador es la función última del ser humano, deseante y deseado...

Tal conocimiento, indisociable de la vivencia del amor original, permite realizar la Unicidad en virtud del cual amor, amante y amado son uno solo en esencia.
  
Las andaduras hacia esa realización unitiva, imagen siempre de camino que culmina más allá de todo camino, se representará de modos diversos:
 * peregrinación hacia la Kaaba (o cen­tro) del corazón,          .
 * progresión por una serie de ciudadelas -o Moradas- concéntricas (imagen también usada por Teresa de Ávila),
 * ascenso por la Escala de las estaciones espirituales y "nombres" divinos, o viajes nocturnos a través de las esferas, al estilo de la ascensión del profeta Mahoma desde Jerusalén.
   
"Ha", por Nuria García Masip (año 2016)
  
Tras esa progresión por sucesivas estacio­nes, desde las cuales el “peregrino” contem­pla a cada paso cambiantes interpretaciones del sentido y nuevas perspectivas de la ver­dad y el conocimiento, el sufí alcanza en viaje circular interior su “morada de las no moradas”. 
 
Al explicar naturaleza de tal vía, los sufíes proponen el símbolo de rueda con 3 grados: circunferencia representando vía de los principios universales (shari`a) y radios correspondiendo a caminos (tariqa) conducentes hacia eje central, 3er. gra­do que constituye realidad esencial (haqi­qa). La misma imagen circular se refiere a diversidad de las religiones y creencias que vienen coincidiendo con el centro, aquella realidad primera y última que las origina, legitima, unifica o trasciende.
 
   
REMEMORANDO, ENTRE IMAGINACIONES CREADORAS: FUNDAMENTO DEL ARTE
  
En el pensamiento sufí, especialmente tras Ibn Arabi, el término polivalente Jayal (en árabe: imaginación) se considera desde tres perspectivas principales.
 
En primer lugar, de­signa el cosmos como Imaginación y espejo de las auto-revelaciones divinas. En segundo lugar, es una denominación del ámbito inter­medio entre los mundos espiritual y corpó­reo, en el que sus cuerpos espiritualízanse y los espíritus corporeízanse; lo sensible se torna inteligible o esto adopta sen­sibles formas tal como sucede, por ejemplo, entre sueños. Y en tercer lugar, hace referencia al ser humano como microcosmos...
 


 'Sinan 2' (2003) de Diego Moya
  
Desde dicha última perspectiva, la imaginación es -por un lado- el alma, entendida como un yo humano intermedio sutil y denso: uno y múltiple, vi­sible e invisible, corpóreo y espiritual; y, por otro, es la facultad imaginativa que permitiría integrar los contrarios. Esta concepción sus­cita entre los sufíes una particular vivencia de las artes en tanto que mediaciones receptivas a inspiración creativa de la realidad.
 
Práctica contemplativa central del sufis­mo es la rememoración (dikr) que consiste sobre todo en una repetición de nombres y atributos divinos, recitación de aleyas del Corán u otras fór­mulas tradicionales, por lo general en conjunción con la respiración; y puede ir acompañada de movimientos o visualización para colores y sím­bolos.

Esa reiteración -rítmica- propia del dikr, audible o silenciosa, se corresponde con repetición de los motivos geométricos, cali­gráficos u otros en las artes islámicas. En este sentido, toda obra de arte propiamente sufí habría sido concebida como alguna rememoración consciente que participa del incesante re­memorarse universal.
 
   
RESONANCIAS E ITINERARIOS MUSICALES
 
Desde los maestros del alhambrismo musical del XIX con caracteres orientalistas y exotistas a otros trabajos de arabistas que, como Asín Palacios, españolizaron el islam peninsular han habido muchas manifestaciones culturales que pensaban las Herencias islámicas de nuestra Península como parte consustancial en toda identidad española.

Cultura iberomusul­mana, interiorizada como parte constitutiva del continuo histórico e imaginario integra­do en la propia identidad, ha generado una particular relación artística con inspiraciones de las artes islámicas tan significativamente representadas por su Mezquita en Córdoba o La Alhambra de Granada.
 
  
En el sufismo, que ha inspirado muchas de las más bellas músicas del islam, se considera que la primera experiencia humana fue su Es­cucha de palabra divina. El samá o audición espiritual integra elementos diversos como dikr (recitaciones) y oración, poemas canta­dos, concierto acompañado de danza extáti­ca, etc. La música, el ritmo y la repetición del mismo conducen a un estado de receptividad que propicia una profundo escuchar interior…
 
   
SUFISMO EN EL ESPEJO DE LA POESÍA Y NARRATIVAS
 
Desde sus mismos orígenes, la literatura española está impregnada por elementos tanto forma­les como temáticos de la lengua árabe y culturas islámicas, como se aprecia por ejemplo en el Cantar del Mío Cid o en el Arcipreste de Hita. Los moriscos -y el islam- son un referente esencial del propio Cervantes, quien atribuye su universal Quijote a la pluma de Cide Ha­mete, su heterónimo musulmán.
 
A lo largo del siglo XX, en buena medida por influjo del africanismo, del orientalismo artístico y de los estudios y traducciones de los arabistas (Ribera, Asín, García-Gómez…), la literatura española se va haciendo eco en diversas formas de esa resonancia arabo-is­lámica latente en la Península; la inherente “orientalidad” española se revela en ambi­valencia de un orientalismo que se reconoce por los legados judeo-islámicos para España, recu­perados como herencia en la literatura.
 
 (copyright) Jesús Mª Muñoz Monje [foto] & J.A. Muñoz Rojas [cita literaria]
 
Federico García Lorca (con su Diván de Ta­marit), Rafael Cansinos Assens (traductor del Corán y de Las Mil y una Noches, de las Gace­las de Hafez y autor de una primera antología española de literatura persa), Juan Goytisolo, José Ángel Valente (tan amante del sufismo como María Zambrano), Clara Janés (prolífica traductora de textos sufíes árabes, persas o turcos, autora del Diván del ópalo de fuego que relata líricamente la historia de los aman­tes Layla y Machnún)...

O... Luce López-Baralt (cuya trayectoria como hispanista e islamóloga cul­mina literariamente con su libro de poemas "Luz sobre luz", tan íntimamente impregnado de alusiones a la literatura sufí), Antonio Gala, Francisco Martínez Dalmases (con su narrativa de tema histórico sobre los moriscos) ú Omar Ben Yú­suf y Mario Satz (por la novela Azahar), etc.


martes, 21 de marzo de 2017

4 'haikus', más, inéditos para el nuevo mes...

                    
   Siguen las huellas
   que ni el granizo vela.
   Son de giróvagos.           

                                    
He aquí, aun en marzo... [© by 'M.M.M'] 
  
             Y la ilusión...
             Titila, entre relámpagos,
             un bosque entero.
       

¡DEL... FIN...-ES... EN MENT...-ES...!
    
              Mares azules,              

              la nieve blanca.
              Todo es agua.*
  
 [* con reconocimiento especial a -la, menor de 11 años, haijin...- Oiane Graciano... ]
   
  
          Una olma, hoy,
          frente a nuestra terraza.
          ¡Está ya verde!
  
     .

miércoles, 15 de marzo de 2017

Urge concretarnos, Ya, una Renta (como nuevo mínimo Asegurable) de Ciudadanía para Todos

 
H@y, en España...:
 
* 3 millones de personas con 65 años, como mínimo, que ni siquiera pueden llegar hasta unos 500 € mediante sus ingresos mensuales per cápita;
  
* otros 2 millones -o sea casi el tercio sobre quienes no sobrepasan 16 años aún- contabilizables oficialmente bajo nuestro "umbral de Pobreza" en rentas;

* e incluso 4 millones más de personas trabajadoras activas con empleo en tan precaria ocupación que tampoco logran salir por él apenas desde dichas "Pobrezas";

* y aparte -o además de aquellos "5" millones "parados" que, sin dudar, reconoció incluso nuestra E.P.A.- terminan sumándonos (conforme a censo total, homologable, según el Eurostat) 9 millones en edades laboriosas al menos para quienes la sociedad no tendrá (desde sus Mercados) ofertas [¡por ninguna hora!] con Trabajos Remunerados ni aun, tan siquiera, Subsidio del desempleo.
   
    
Eso puede resumir los principales resultados como problemática sin corregir, y tan impresentable cuanto duradera, del muy complejo Sistema para Rentas Mínimas [vigente] por nuestro actual Estado de Bienestar.

¡Así que algo distinto -en realidad, con menores tolerancias o/y conformismos...- deberá resolverse, frente a todo este gran problema sumando 18 millones de personas (entre nuestra conciudadanía) desde ahora mismísimo sin más aplazamiento, consecuente mente!

Pero las únicas alternativas reales que cambiarían el paradigma de tamaña mala práctica -contumaz e invariada mente, hasta hoy, aquí- solo pueden apuntar en direcciones de lo englobado por cualquier Renta Básica [Ciudadana] o Ingreso Universal [Incondicionado] futurible.

En efecto, como -con testimonio de un amplio abanico- muy bien acaban de recapitularnos al respecto [Mª Fdez: 'Mitos y realidades de la R.B.U'], el Debate ha comenzado...

Sobran sin embargo ya demasiadas ocasiones discutiendo tantos pros y contras que oponen a las unas (o RR.MM.), existentes, con los otros -IU/RB- más novedosos: nunca se podría dar el salto al 100% entre ambos modelos, cualquier reforma en la realidad habrá debido transitar gradualmente primero por alguna eventual 'solución de continuidad' mixta e intermedia; y eso es aquello sobre lo cual afinar más necesitaremos [M. Laparra & L. Ayala, 2009], precisa mente.
 
El director para el Departamento de Economía y Empresa en la Universidad Cardenal Herrera (CEU) valenciana [prof. Enrique Lluch Frechina] nos acaba de ofrecer un análisis reciente sobre ventajas e inconvenientes del, frente a las actuales Rentas Mínimas, implantar Renta Básica en España. Su trabajo -recién publicado desde HOAC- estudia "necesidades del asegurarse socialmente que las personas y sus familias puedan disponer de alguna renta permitiéndoles, para escenarios como los actuales, vivir dignamente con elevado nivel en 'paro estructural [o miseria laboral]'; es decir, frente a empleo sin cualificar, cuya remuneración está por debajo del umbral de pobreza".

Según se ha explicado [en "Justicia Social, desde el bien común; Rentas de Ciudadanía"], nuestras actuales Rentas Mínimas -destinadas a personas capacitadas para trabajar, aunque sin lograr empleo que permita salir desde su pobreza- vienen siendo ya hoy de muy diversas índoles, incluyéndose por ejemplo entre todas ellas: Pensiones no contributivas, los Complementos mínimos de pensiones, Rentas activas de inserción, las Pensiones asistenciales y Rentas mínimas de CC.AA. o algún Subsidio del desempleo.
  
  
Pero las cuantías medias en esos conjuntos de Subvenciones [que se pagaron a 616.885 personas durante 2015] rondan sólo unos 125 €/mes; y sus requisitos para obtenerse son cada vez superiores... Además, dado que conseguir algún empleo hace perderse todos los derechos a percibir subsidio, las personas receptoras podrían 'pretender' continuar siendo desempleadas [al haber caído entre 'trampas' del paro con pobreza]: "Un empleo puede significar otra fuente de ingresos con bastante menor seguridad, y no suponiendo tampoco mejorar la situación previa, si el salario es bajo".
  
Frente a esas rentas, aparece contrapuesto el modelo de la Renta Básica que se percibiría con futuro carácter general por mero hecho del ser ciudadano, sin condiciones ni requisito previo: "de implantarse, recibirán esa prestación todos los españoles en igual cuantía; e independientemente de sus demás circunstancias u otra renta más ya percibida y del que se pudiera -o no- tener un trabajo remunerado".
 
Y por cierto, prevenir 'contra una Renta Ciudadana sin empleos' es tan torticero como resultaría el negarles a millones de nuestros convecinos las (hoy aquí, Gratuitas, Universales e Incondicionadas) Educaciones -o, también, Sanidades- Públicas, para rechazarse así cómo también ahora puede 'gorronear' cualquier parásito [Botín, u otro similar, ricacho]... los mismísimos niveles cívicos del Bienestar social colectivo.

Según estimaciones entre diversos estudios comparados, una cuantía óptima para esa RB -considerando su viabilidad económica y las contribuciones efectivas a erradicación de pobreza extrema- se situaría sobre 7.500 €/año (ó 625 al mes) por el primer adulto en la unidad familiar, recibiendo aprox. 50% los restantes que convivan bajo un mismo techo más otro 30% aquellos menores de 14 años [J. Arcarons, A. Domenech, D. Raventós, Ll. Torrens et alii]. Lo cual resulta bien factible; pues "el montante total sólo incrementaría un 3% sobre PIB las trasferencias corrientes a familias ahora, por parte del Estado y CC.AA, que habían sido unos 208.000 millones de euros con los presupuestos para 2015".
  
Entre las ventajas por tal fórmula, el profesor de la CEU-UCH destaca su erradicación de pobrezas extremas y reducciones en las desigualdades, así como fomentarse que aceptar trabajo sea una oportunidad para incrementar los ingresos o mejorar niveles de vida; puesto que la renta básica no se pierde aun encontrando un empleo. "Además, al no tener que realizar comprobaciones del cumplimiento de requisitos para percibirla [puesto que implica derecho por toda ciudadanía] eliminará el estigma que supone recibir subsidios actualmente y simplificaría muchas burocracias ante su concesión, reduciendo así tamaño en Administración".

Por otro lado, las personas que se dedican a tareas no remuneradas también imprescindibles para la sociedad -como son labores del hogar, cuidado a los mayores y niños o actividades en voluntariados- podrían seguir realizándolo, pero con independencia económica ya: "El ingresar esa renta básica libera las personas del necesitar depender, de otros, para vivir".
  
La Seguridad Social publica el desglose de los importes en las Prestaciones...
  
Sin embargo, una tal R.B... no plantea solo controversias en cuanto a su sostenibilidad o al incremento del gasto público. Cierta "desincentivación" hacia el trabajo sería una de las principales objeciones planteables al implantarse cuando su cuantía fuera demasiado elevada, puesto que quizá pudiere comprometer a una financiación total del sistema. "Es lo también denominado como 'peligro del gorrón': el cual se aprovecharía de alguna sociedad generosa, pero sin aportar nada para [mantener a] ésta"... Una hipótesis cuyo efecto cabrá imaginarlo producido en casos con renta más alta que lo propuesto aquí, sólo, según ha de quedarnos muy claro.

Por el contrario, Renta (básica) podría incentivar [hacia búsquedas] del empleo para mejorar los ingresos o el nivel de vida. Y reforzaría las capacidades de negociación del trabajador, al que le cabría mejor rechazar empleos para salario demasiado bajo... e incluso acordar con la empresa remuneraciones menores -mas compensadas por su renta básica- reduciendo los costes empresariales pero sin perder poder adquisitivo laboral.

"Estudios múltiples apuntan hacia que una Renta Básica incrementaría Empleo a Tiempo Parcial, flexibilizaría mucho más nuestros Mercados laborales e incluso aumentaría el colectivo de los Emprendedores"; ¡y no -como tantísimo se suele temer- al contrario, para nada!.

El profesor Lluch concluye que los debates verdaderos aludirían al cambio de modelo: "alguna Renta Básica supone novedad sustancial en el funcionamiento y la filosofía del Estado de bienestar, que no tan sólo se regiría por criterio contributivo: su recepción ya no dependería más de las aportaciones -antes realizadas- vía cotización, como para Pensiones o Subsidios del desempleo actuales. Por lo tanto, el Estado no estaría subviniendo al mantenimiento del nivel de vida en cada cual; sino garantizándonos los Ingresos Mínimos para... todos... llevar una vida digna".
   
El crecimiento económico y "salidas a las crisis no deberían medirse por incrementos en la renta media; sino con el aumento per cápita para los más desfavorecidos, [...] han de ser la prioridad aquéllos que menos tienen". Sin embargo, respecto a materias de bienestar las "prioridades política y económica siguen -tan persistente como errónea mente- centradas en el crecimiento del PIB; pensando que lo principal es crecer más, entre todos, con independencia de cómo se distribuyen los aumentos o  del si se generan bolsas con pobreza"
  
  
Con todo, el enfatizar estas disyuntivas maniqueas entre lo presente [ya] y aquello cuanto es posible [tan bien] no nos conduce sino al absurdo del "asno de Buridán", bien sabido... Lo que se trate será de facilitar esa ineluctable transición del andarnos, desde unos males hoy sufridos a cualesquier mejoras por definir, para estos concretísimos casos nuestros actuales:

Pero además, y entre tanto, ¿cómo puede alertarse sobre supuestos 'gorrones' voluntarios aún? Cuando este Mercado laboral nunca da ninguna ocupación sino para unos 21 ó 20 millones de personas, como máximo, se ve lo hipócrita del escandalizarse porque algunas otras (e incluso muchas) entre las restantes (hasta 46'5 millones) que aquí sumamos 'quisieran rehusar sus trabajos en algunos emple[uch]os al tener -ya- los ingresos mínimos...' con Renta Básica.

Así pues y en todo caso, mientras la cosa no cambie: sean ellos u otros, irían a seguir desocupados... más de 25 millones igual, forzosa mente...

Hoy, desde luego, esos discursos -del, muy laborista... pero no menos caduc[ad]o, "principio paulino" (y argumentarios de ahí derivables)- parecen por completo disparatados en cuanto a toda una tercera parte de la población... ¡que ni siquiera edad tiene para estar activa pretender!
   
* Hace ya una larga década, el año 2006 un 'Observ[ATTAC]atorio madrileño sobre la R. B...', se planteaba respecto esta precisa casuística la reivindicación de ciertas medidas urgentísimas -[tan sólo] iniciales o- en transición: "Alguna implantación gradual para las Rentas Básicas de Ciudadanía es viable, hoy aquí: a los Mayores y Niñez, primero".

* Pero desde otros 5 años antes, en la estela del gran precursor André Gorz, nuestro Prof. [Imanol Zubero] apuntó hacia los ineluctables futuros: Disociar unas Rentas –básicas…- del Empleo, ¿cuánto, cómo y por qué?
   
Y en fin, a horas del apuntar cualquier precisa 'hoja de ruta' (nunca, sólo, blanca ni negra) posible al Impuesto negativo, retómese ante todo el aviso dejado -desde su 'Fausto'- por J. W. Goethe: ", son las teorías grises, querido amigo; mas verde brotando sigue aquel árbol de dorados frutos que siempre la vida es..."
  
Aquí van surgiéndonos variopintas propuestas en torno a las RB -última mente- sobre todo con respecto del cómo ya poder articularse aquellos muy primeros pasos, transitorios, imprescindibles para solapar el actual 'Estado de Bienestar' y cualesquier otros arranques hacia 'lo nuevo'...
  
   
-  Ahora ya podríamos quitar Exclusiones, con -entre otras, rentas 'Mínimas' y 'Básica'- algún 'Mínimo Automático'... [según acaba de pormenorizarnos un ex rector en la UNED, prof. Juan A. Gimeno, mediante su más detallada y reciente aportación ante cierto I Foro Economía Progresista]

- Se insiste más aun con ello sobre... "hoy, respecto de la RENTA BÁSICA, ¿qué podemos?" [esto es, cuantificándose los análisis referentes a crucial asunto muy específico; del "Cómo -en fin, y resumiendo- iniciar, aquí ahora, vías de Rentas básicas: ¡Podemos, al 'coste Cero'...!"]

- El problema práctico del precisar vía tendente hasta unas (más o menos) 'RR.BB... para rescatarse a las Mayorías aquí ahora', desde lo que hoy nos arruina, fue desbrozado antes por 2 muy expertas autoridades [Luis Sanzo y Rafael Pinilla] remarcables entre quienes ya vienen trabajando en los únicos programas de Rentas Mínimas vigentes...

- Asimismo coinciden definitivas propuestas "Hasta una Renta Básica: el camino transitable desde ya, hoy aquí, sin más enredos..." por parte del destacado representante universitario barcelonés en el B.I.E.N (Basic Income Earth Network) y para su revista "Basic Income Studies" [prof. José A. Noguera].

- Y por último, hay además aportaciones no menos paralelas de 'Pasos hacia RB para ya, desde ahora, en crisis asegurar algún "Mínimo Social" aquí Pendiente...' justificándose sus viables factibilidades político-financieras [verlo desde las Actas referentes a XI Jornadas Economía Crítica]...