viernes, 22 de abril de 2011
Maratón -The Pen&Word- s/Poesía Hispana en Biblioteca del Congreso USA: Teatro de la Luna
jueves, 21 de abril de 2011
De realidades -trabajadoras... hoy- en España
Un siempre indomable Prof. emérito Vicenç Navarro es quien ahora y en Público nos las recuerda: "El 'Economic Policy Institute' de Washington, uno de los centros de investigación económica más conocidos y prestigiosos norteamericanos, publica cada 2 años un informe sobre la situación de su población trabajadora ('The State of Working America ...') que es referencia muy utilizada -por aquel país e incluso para el mismísimo Congreso federal de los Representantes en EE.UU– por traer documentación exhaustiva sobre el mundo del trabajo. Incluye también información sobre las condiciones laborales en la mayoría de países de la OCDE de semejante nivel de desarrollo económico, presentando datos y gráficos que son de una gran utilidad para los estudiosos del mundo laboral en los países con mayor nivel de desarrollo económico.
En su último informe, publicado hace sólo unas semanas, hay datos económicos y sociales que cuestionan claramente las cifras que constantemente se utilizan en los centros que reproducen la sabiduría convencional de España. Así, en el capítulo sobre horas anuales de trabajo por trabajador, España (presentado tan frecuentemente como un país de gran laxitud e indisciplina laboral) aparece como uno de aquellos en donde sus trabajadores trabajan más horas al año. Concretamente 1.654 horas, muy por encima del promedio en los países de la OCDE, 1.628 horas [ver "Trabajar Menos –por cada ocupación o empleo- para que podamos, en general, así Ganar Más"]...
Más sorpresa será el indicador que contradice otro elemento de la sabiduría convencional que habla constantemente de un escaso crecimiento para las productividades como causa de la escasa recuperación económica española. Este informe señala que el crecimiento de la productividad en España durante el periodo 2007-2009 fue el mayor (5,4%) de los países de la OCDE, cuyo promedio fue de -1,1%. El de Estados Unidos fue menor que el de España, un 4%; lo que contrasta con la mayoría de países en la OCDE, que sufrieron un descenso de su productividad. España fue también el país que destruyó más empleo, con una tasa negativa en producción de empleos (-7,2%) [ver "Quiá: nuestra competitividad no depende tanto de Salarios; ni tampoco la Pensión, sostenible..."].
Otro dato interesante sería un nivel -comparativo- de dicha productividad, dato diferente al del crecimiento en la misma. De nuevo, las cifras contradicen la visión promovida por conservadores y neoliberales que constantemente se refieren a España como un país con muy baja productividad. El informe señala que la productividad española está por encima no sólo de Grecia, Portugal e Italia, sino también de Japón y Nueva Zelanda [ver "Cómo puede tenerse inflación de Precios mayor donde más bajó el Salario real, como en España"]...
Es también interesante analizar los salarios. España tiene los más bajos de la OCDE (junto con Grecia y Portugal). Su compensación salarial por hora en la manufactura (cuyos trabajadores son los mejor pagados de cualquier país) es sólo el 85% del de EEUU. La mayoría de los países en la UE-15 están muy por encima de EEUU (Dinamarca 172%, Suecia 147%, Noruega 197%, Alemania 153% o Austria 144%). Tales datos muestran que no pueden justificarse los bajos salarios en España recurriendo al argumento de una supuesta baja productividad [ver "¿Son 'demasiado altos', en España, los Salarios? No en términos reales; ni tampoco han crecido!"].
España, hoy, no está realmente a la cola de la productividad en la OCDE. Sí que está, en cambio, a la cola de los salarios. En realidad, el nivel salarial responde más a causas políticas que a causas económicas. Así, la variable que tiene un gran poder determinante del nivel salarial (y también, por cierto, de la actividad redistribuidora del Estado) es el poder sindical. A mayor poder sindical, mayores salarios, menores desigualdades y... una mayor productividad [ver "¿Reforma Laboral? Las Empresas apuestan hoy masivamente por empleo de cortísima duración"]...
Nuevo dato de gran interés es que, en el análisis del sector público, el informe señala que España es uno entre los Estados menos redistributivos. El indicador que el informe utiliza para medir la capacidad redistributiva del Estado es el porcentaje de la población en situación de pobreza antes y después de las intervenciones del Estado. El Estado a través de impuestos, por un lado, y las transferencias públicas, por el otro, afecta a la distribución de la renta en un país. Pues bien, España es uno de los países donde el Estado tiene menos impacto en la reducción de la pobreza. Ésta pasa de ser el 17,6% de la población, antes de que intervenga el Estado, a un 14,1%; sólo 3,5 puntos menos. En la gran mayoría de países, la reducción es mucho mayor. EEUU, uno de los países con mayores desigualdades, reduce la pobreza 9,2 puntos; más del doble que España. Y si nos vamos a países de tradición socialdemócrata como Suecia, vemos que su reducción en la pobreza es de 21,4 puntos. España, repito, sólo 3,5 puntos [ver "Cada vez ‘Más desiguales’, en realidad, cuando aquí tanto se presume de Social e 'Igual...dá'..."].
Esto quiere decir que aquí son los impuestos muy regresivos y las transferencias públicas muy escasas. En la UE y entre todos los restantes países más desarrollados las naciones nórdicas, junto con Francia, son las más redistributivas... España, junto con Holanda, Japón y EEUU, son de lo menos redistributivo. Es interesante señalar que otros países más redistributivos (Suecia, Noruega, Dinamarca) están por encima del promedio de productividad en la OCDE [ver "¿En qué va mal nuestro Impuesto de la Renta: por qué lo tenemos hoy tan demasiado negro?"]...
El país del mundo con la mayor productividad es Noruega, y es a la vez también uno de aquellos en los que su Estado tiene mayores impactos redistributivos. Eso cuestiona el dogma neoliberal según el cual la eficiencia económica requiere inequidad [ver "Más -y mejores- Presupuestos aquí Posibles, ya"].
Lo que también llama la atención son los datos sobre igualdad de oportunidades medida por la tasa de movilidad vertical (de padres a hijos) entre generaciones. España, junto con Italia, Irlanda y EEUU, es uno de los países que tiene menos movilidad social. El sistema educativo tiene un escaso impacto en igualar las oportunidades de las distintas generaciones. Esto está relacionado con el sistema educativo dual de las clases pudientes enviando sus hijos a la escuela privada, y otras clases trabajadoras o medias enviando sus hijos a la escuela pública. En estos países, los hijos de la clase trabajadora lo tienen más difícil para alcanzar niveles de clases de renta superior [ver "¡No por mucho recortar… amaneces, tú, a salvo!"]... Y ahí termina esa fotografía –no muy halagadora– para la situación de las clases trabajadoras hoy en España."
miércoles, 13 de abril de 2011
Sobreviviendo a la vida (teorías y práctica)...
No falta en un argumento trufado de referencias edípicas, la presencia de una entidad moral que enjuicia (y pone no pocas zancadillas) al protagonista; un Superego representado, de forma irónica, por una mendiga arisca que transita con un carro infantil por el desolado paisaje en el que se ha convertido el Subconsciente de Eugene, gritando a los cuatro vientos su condición megalómana.
Varios biógrafos y críticos han señalado ya insistentemente la coincidencia entre año fundacional del Grupo Surrealista Checo y el nacimiento de Jan Svankmajer: 1934. Coincidencia profética, por cuanto ambos sucesos, ocurridos en Praga, iban a estar ligados de manera definitiva, pues la vida que al cabo hizo suya el cineasta checo, así como su obra, que ya supera la treintena de películas, ha estado estrechamente ligada a esa coalición de creadores, que aún persiste en la República Checa.
viernes, 8 de abril de 2011
Tras quienes nunca, ya, podremos más tener
“Daré rienda suelta a mis quejas; hablaré con la amargura de mi alma. Le diré a Dios: ¡no condenes; hazme comprender por qué me juzgas así! ¿Te parece bien ese oprimirnos y desechar la obra de tu mano mientras resplandeces ante los consejos del malvado? ¿Acaso son tus ojos humanos? ¿Acaso ves como ven los hombres? ¿Son tus días como los de un hombre; o tus años, como los del mortal, para que nos indagues cualquier iniquidad y rebusques entre mis pecados? Tú sabes que yo no soy culpable, pero no hay quien me libre de tus manos.”
... / / Cuando dos que se aman –todavía- / se separan / algo los cubre suavemente / y un lenguaje tácito se nace / en el sitio en que esos dos dejaron / la recíproca tortura de olvidarse. / Algo envejece para siempre sobre el aire. / Posiblemente, si se suicida un ángel es de tristeza …”