viernes, 9 de octubre de 2015

Ahora, sí, el Partido se disputará por el Centro: primera Legislatura sin Juan Carlos I, próxima

         
¡Va ya chiste de 'campaña electoral' propinado por ese par que tal baila...!
   

  
Desde que por 'La Transición' en democráticos devinieron Gobiernos "bien atados" del previo Dictador, lo dominante fueron unos Partidos con el 'rodillo' de sucesivas Mayorías absolutas, más a veces algún minúsculo apoyo mediante nacionalista 'bisagra' solo concurrente para su Autonomía territorial... Y así, según indicó cierto longevo gobernante más ducho en 'finura' como aplicado discípulo del 'Príncipe' de Maquiavelo, "e in Spagna ...? Manca finezza...!".
    
O sea, que -salvo los 'Consensos globales', abusona mente, totalitarios- el arte de la cívica Coalición constructiva nos viene siendo por lo general demasiado ajeno aún aquí. Y ello salpica con análogos modos al análisis dominante, salvo un escasísimo panorama de comentaristas algo excepcionales al respecto, como Enric Jualiana Ricart...
    
Quizá gracias a su etapa como corresponsal periodístico en Roma entre otras cosas, hoy dicho director adjunto de 'La Vanguardia' sabe ofrecernos algunas muestras recientes de disquisición política menos torpe, sobre todo por cuanto al soberanismo catalán -primordial mente- no le toque:
   
      
"No quisiera ponerme pesado con Portugal, puesto que no es costumbre, ni en Madrid, ni en Barcelona, observar los acontecimientos del vecino país como un faro para las Españas. Quisiera insistir, sin embargo, sobre algunas de las lecciones que se derivan de las elecciones legislativas del pasado domingo.

Es verdad, no estamos ante el épico novelón de Grecia. El relato portugués es algo más aburrido. Mi sugerencia es no caer en el desprecio. Atenas nos enviaba en julio la voz cristalina de Eleftheria Arvanitaki entonando la preciosa canción 'Meno Ektos' ('Me quedo fuera'). De Lisboa nos llega ahora la voz aterciopelada de Mariza cantando 'Pequenas verdades'.   
   
Grecia se preguntó si podía chocar frontalmente con el Directorio Europeo y se respondió orgullosamente que sí en el referéndum del 6 de julio. Una semana después, Alexis Tsipras daba media vuelta ante la amenaza alemana de expulsión del euro, atemperada finalmente por el gobierno socialista francés. Aquel mismo día, curiosamente, se cerraba en Barcelona el acuerdo para la coalición soberanista 'Junts pel Sí', muy influida por las épicas radiaciones griegas.

Hagamos memoria. El cambio en las alcaldías de Barcelona y Madrid estaba causando sensación. CDC y ERC compartían el temor a que un holograma catalán de 'Podemos' entrase como 'caballo de Troya' en el Parlament y les desbaratase el juego. Así se fraguó la candidatura encabezada por Raül Romeva.

Un corrimiento a la izquierda por estética para cubrir mejor el flanco. Todos con camisa blanca y fuera corbatas. El día que se pactó la alianza soberanista catalana, 13 de julio, festividad de San Enrique, emperador de Alemania, Atenas se rendía. Grecia dejaba de ser faro de la revuelta, para volver a ser 'excepcional': el destacamento de Europa en puertas de Asia, que no hay que perder aunque cueste dinero. Tsipras, político bizantino al fin y al cabo, decidía no quedarse fuera y aceptaba esa pequeña verdad desde una geopolítica occidental. El abrazo con Moscú ya no les era ningún espejismo de alternativa.
   
Portugal escribe ahora la misma historia, al revés. Después de cuatro años de paciente sufrimiento social, el Parlamento de Portugal podría levantar este otoño un gobierno desafiante –tiene los escaños suficientes para ello– y no lo va a hacer. El Partido Socialista Portugués, de fuerte tradición atlantista desde la Revolución de Abril de 1974, se niega a formar una coalición alternativa con el 'Bloco de Esquerda' –vencedor moral de las elecciones con la valiente diputada Mariana Mortágua, azote del arruinado Banco Espirito Santo– y el rocoso Partido Comunista. Los socialistas mantienen la política de 'bloque central', vigente desde que los militares revolucionarios regresaron a los cuarteles, tras una dura pugna entre socialistas (Mario Soares) y comunistas (Álvaro Cunhal) que pudo haber acabado en guerra civil. Desde entonces el marco inamovible de la realidad portuguesa lo dibujan la OTAN, Bruselas y la exploración de oportunidades en las antiguas colonias africanas, Angola en cabeza, y en el gigantesco Brasil.
     
El fado portugués no es 'marianista [o sea, pro Rajoy]', pues la derecha lusa ha perdido 25 diputados en estas elecciones; pero sí centrista. Y en España hubo ayer una noticia que también tiende a alejar la hipótesis de un futuro 'Frente popular'... Podemos no ha podido absorber a Alberto Garzón, la figura más señera de Izquierda Unida, de manera que ambas formaciones competirán arduamente, con la consiguiente merma en el reparto provincial de escaños. No es fácil que PSOE, Podemos e IU sumen mayoría el 20 de diciembre, lo cual ayuda a Ciudadanos a ubicarse en el centro del tablero.

En Catalunya, 'Convergència' negocia con la CUP: más que griega, franciscana."
   
 (Enric Juliana: 'La partida se disputará en el centro', Madrid, 7/10/2015) 
   

Pero aquí aun hay más ahora: danzan los dirigentes políticos en televisión y comienza el baile sobre lo del Concierto vasco más el Convenio navarro, la presidenta de la Junta de Andalucía cuestiona equidad del Cupo y el lehendakari responde que lo suyo es 'línea roja'.
  
“Otras cosas que pasan. La Brigada Aranzadi se pone a bailar, siguiendo los pasos de Miquel Iceta, indiscutible triunfador mediático de la campaña electoral catalana. Simpática escena televisiva de Soraya Sáenz de Santamaría, que ha conseguido un buen spot. Ese tipo de mensajes pueden parecer muy banales, y así lo perciben muchas personas formadas en la primera modernidad, cuando todo iba "muy en serio", pero forman parte de la nueva normalidad.
   
La banalidad es el sujetador de las actuales democracias. Contiene, canaliza y desvía las periódicas aproximaciones al drama. El socialista Iceta, un tipo intuitivo, triunfó en la campaña catalana porque su simpático bailoteo invitaba a desdramatizar una situación demasiado estresante para mucha gente. Iceta [con sus desenfadados lemas del “Cupo sí, Cuponazo no…] relajaba. Aquella frase de André Gide que tanto le gustaba repetir a Josep Pla: "Lo más profundo que posee el hombre es su piel".
   
La vicepresidenta baila porque el Partido Popular se ha propuesto ganar las elecciones generales con la ayuda de la televisión, después de cuatro años de acuartelamiento administrativo; la Brigada Aranzadi se dispone a bailar como si fuera un regimiento de húsares de la Viena imperial. Operación Simpatía (…) Con notable habilidad, la 'nueva' izquierda había conseguido capitalizar el súbito interés de los canales de televisión por el debate político, como consecuencia de la crisis económica. Porque los mejores polemistas televisivos eran jóvenes partisanos de Podemos, contra tropa conservadora -entre pintoresca y agresiva- que al público joven disgusta…
    
     
Otras cosas que pasan. La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, acaba de abrir en Madrid, con mucha intención, el debate sobre la equidad del Concierto vasco y el Convenio navarro. Latente desde hace mucho tiempo, esta discusión difícilmente podía mantenerse encapsulada, ante la firmeza y gravedad de la protesta catalana. En honor a la verdad, ha sido el nuevo gobierno valenciano de izquierdas el que ha roto el silencio, al situar en el centro de su programa la disconformidad con el actual reparto del esfuerzo fiscal en España. Valencia viene a decir lo mismo que Catalunya desde el autonomismo. Y Baleares, ahora reconciliada con el idioma catalán, se expresará en los mismos términos, con lo que ya tenemos todo el arco mediterráneo inflamado.
  
Susana Díaz, ágil, lista, larga del 'privilegio fiscal' de vascos y navarros para fortificar la posición andaluza, receptora de la solidaridad inter-territorial. En Bilbao y Pamplona no se van a quedar callados. Ellos también hablarán claro. Iñigo Urkullu, presidente del Gobierno vasco, advirtió ayer que se está desplegando una "campaña" contra el concierto y señaló que este será 'línea roja' del Partido Nacionalista Vasco en los próximos compases de la política española. El baile se anima.”

(Enric Juliana: ‘Empieza el baile del concierto vasco’, 9/10/2015)

  

3 comentarios:

  1. El estabilizar a Felipe VI está planteado por un relevo -y segunda Transición- generacional preciso para el Ibex y que pasará por reagrupar bipartidista PPSOE menguante -con 'superglue' del Ciudadanos- e incluso, si al fin fuera necesario, con enroque de la mayoría gubernativa en una hoy aún 'tapada' S3 (Soraya Saez de Santamaría, "n°2") como novedad tras gambito inevitable de Rajoy...

    Y además algún cambio -hasta constitucional- hará falta en lo periférico, de nacionalidades antes imprescindibles como caladero para bisagrismo de gobernanzas, tocando el Cuponazo fiscal vascongado que inflama demasiado a todo el arco mediterráneo...

    Salud,
    JML

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  2. Según bien apunta Joan Tapia hoy: "Rafael Jorba, un periodista con gran experiencia en información política -tanto de Francia, donde fue corresponsal, como en 'El Periódico', 'El País' y 'La Vanguardia'-, escribió ayer con agudeza: “El problema no es la CUP, 6º grupo del nuevo Parlament, con cerca de 338.000 votos y 10 escaños. La CUP es previsible: hace lo que dice.

    El problema es CDC, aquel partido del President Mas, que parece dispuesto a sacrificar en el altar del Procés -y poder- su ideología liberal más todo un perfil reformista. Lo dijo hace ya una semana Neus Munté (la vicepresidenta actual con Mas): “Hemos pasado muchas pantallas”. Sí, el problema es CDC, que en su huida hacia delante ha saltado tantas pantallas que no se sabe si ha entrado en el espacio sideral o en algún agujero negro..."
    .

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  3. Lúcido está ya desde 'La Vanguardia', Barcelona, Enric Juliana hoy: “HUIDA HACIA DELANTE.

    En Milán, hermanada siempre con Barcelona, se produjo durante 1947 un acontecimiento recordado por los anales como un buen ejemplo del eterno dilema entre las fugas a delante y el realismo político (…)

    En noviembre, el ministro del Interior destituyó al prefecto (gobernador civil) de Milán, Ettore Troilo, jefe partisano de brillante historial. Hubo protestas y un grupo de militantes comunistas ocupó la prefectura de Milán, en señal de desobediencia y ‘DESCONEXIÓN’ con el nuevo poder blanco.

    Ocupado el palacio gubernamental, el jefe los comunistas milaneses, Gian Carlo Pajetta, llama a Roma: ‘Compagno Togliatti, te comunico que tenemos la prefectura de Milán en nuestras manos’. Silencio en la línea. Palmiro Togliatti, glacial, responde: ‘¿Y qué piensas hacer con la prefectura de Milán?’. Ligero carraspeo del joven Pajetta, que esperaba un ‘¡Bravo!’ desde el otro extremo de la línea. Consigna del secretario general: ‘Mira cómo SALIR CUANTO ANTES DE AHÍ, sin hacer el ridículo’.

    2015. En la Barcelona posmoderna, turística, gestual, teatral y fuertemente radicalizada por la crisis económica, los principales dirigentes de la amplia pero fragmentada corriente independentista acaban de tomar la decisión de asaltar la autoridad del Estado español con un papel.

    Nada extraño que una de las primeras decisiones de la nueva presidenta del Parlament de Catalunya y sus amigos, después del BRIOSO VÍTOR en favor de la República catalana, fuese hacerse su ‘selfie’ como recuerdo de un día tan señalado (…) Autorretrato del año de las emociones fuertes, mientras desahucian a los primos convergentes. Esa es la más verídica declaración de intenciones de la futura clase dirigente catalana, llamada a sustituir a quienes estas semanas son objeto de registro policial.

    La posmodernidad admite ironías que casi eran inimaginables en los momentos más dramáticos del siglo XX. Un parlamento que no se pone de acuerdo para elegir al nuevo presidente del Ejecutivo, después de unas elecciones que han dividido en 2 la sociedad catalana, se propone aprobar de manera inmediata una moción PRO DESOBEDIENCIAS al Tribunal Constitucional y a las principales leyes vigentes, anunciando la próxima instauración de una República catalana, sobre la que la mayoría de los electores no se ha pronunciado, puesto que no figuraba en el programa de la coalición vencedora.

    No se sabe si habrá President en los próximos 70 días, y ya se plantea un programa de ruptura, con una República que no constaba en el programa electoral vencedor (…) Estamos ante una situación verdaderamente insólita en las democracias europeas. FUGAS hacia delante a toda castaña.

    En paralelo a esta nueva aceleración táctica del independentismo exprés - no apoyado en manera explícita por el mandato de las urnas, insisto- la policía registra el domicilio del hombre político más relevante en Catalunya en los últimos 50 años y el de diversas personas directamente relacionadas con el partido gubernamental, en busca de pruebas que demuestren el COBRO DE COMISIONES por la concesión de obras públicas; el famoso 3%, inscrito ya de manera indeleble en la cultura popular.

    Mientras la declaración de independencia exprés entra en el registro del Parlament, las televisiones difunden imágenes de la colección de coches de lujo de uno de los principales investigados. El trallazo en la opinión pública es fenomenal…

    Cuando la política se complica sugiero siempre un ejercicio: intentar explicar lo que está pasando a un amigo extranjero. Voz alta, distancia y traducción. Ayer lo hice y llegué a la conclusión de que el grupo dirigente catalán ha decidido la fuga hacia adelante, preso de una doble angustia: la enorme resistencia de la CUP a la investidura de Mas y el temor a una posible desintegración de CDC, ante el salto de cualidad de la investigación judicial, que podría estar contando con nuevos e insospechados informantes…

    La pregunta del 1947 aún tiene sentido: ¿Y QUÉ MÁS pensáis hacer después de la declaración?...”

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