lunes, 3 de septiembre de 2012

Un POCO, de -lógica mente...- más, por FAVOR


Cuando 'tres-décadas-y-media-ya' tras de una Guerra [In]civil nos ahogaban CRISIS análogas por su gravedad a lo de ahora, aquí se 'pudieron prometer y prometieron' e incluso se hicieron de verdad aquellos [imperfectos, ¡pero valiosísimos!: reales...] "PACTOS DE LA MONCLOA..." (con aquel mayor 'Programa extraordinario de Inversiones en Educación...' por estas tierras nuestras desde la II República nunca conocido, aquella Reforma fiscal que introdujo un tipazo máximo del IRPF progresivo... superior al que nunca hemos vuelto a tener [¡y exposición pública en las liquidaciones de todo el mundo, luego suprimida!] más aquella Eliminación súbita para la mayor parte de todos los abusivos coches oficiales... previamente acumulados: ¿acaso no recuerda nadie cuanto tan bien se puede comprobar desde cualesquier hemerotecas aún?); de lo que -¡¡ay!!- pasadas otras 'tres-décadas-y-media-ya'...
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Nos conviene pasar cuanto antes a, como hizo el polémico Luis Garicano, ayer, echar algunas cuentas realistas: 'El modo de proceder de Alemania en la crisis del euro es el opuesto al de España. Nuestro país está obsesionado con la crisis al día a día y busca parches, financiaciones a corto plazo que permitan salir de este mes o este trimestre, ganar tiempo “hasta que la crisis se pase” y vuelvan los brotes verdes!...'.

Alemania, por el contrario, trata de construir un sistema alternativo que funcione. Alemania entiende perfectamente [que las cosas actuales con] el Euro, tal como había sido creado, [son] completamente INSOSTENIBLE[S], pero su reacción no es poner ningún parche para conseguir que Grecia sea sostenible 1 mes ó 3 más, sino buscar reglas e instituciones nuevas que aseguren que [lo d]el Euro funciona a largo plazo.

La preferencia por el orden, el sistema, las normas, el 'Ordnung', es una característica clave del sistema económico que Alemania se dio a sí misma tras la Segunda Guerra Mundial. Del caos absoluto y el derrumbe económico que siguió a la caída de Hitler, con parches por doquier en forma de controles de precios y producción planificada e impresión de dinero descontrolada, surgió una visión alternativa, propuesta por el economista Wilhem Ropke en un panfleto de 1947 (y basada en ideas de la década anterior de Walter Eucken y otros). Se trataba de liberalizar los precios y salarios, abandonar la planificación de la producción e introducir una moneda sólida y segura. Estas ideas, implementadas con la oposición de los aliados por el nuevo ministro Ludwig Erhard en 1948, dieron lugar al milagro alemán.

Ésta es la leyenda fundacional de la República Federal. Frente a la dictadura fascista y al desorden monetario de Weimar, se impone la visión ordoliberal, que combina la libertad de mercado con un Estado fuerte que impone y vigila las reglas del mercado (seguridad jurídica, libre entrada, competencia) y una moneda sólida que evita los atajos inflacionistas de Weimar, atractivos a corto plazo, pero siempre costosos al final (la 'droga' a la que se refería el presidente del Bundesbank hace unos días). Y esta es la visión que explica la actitud de Alemania en la crisis del Euro, un intento de construir, sobre las bases del caos monetario y financiero actual, un edificio ordenado basado en una moneda sólida y en instituciones y reglas que den a los países los incentivos adecuados para gobernar con prudencia.

Intentando hacer algunos puentes entre lo urgente, que es necesario para no ahogar a los deudores (visión del Sur) y ese 'ordnung' del Euro a largo plazo (la versión del Norte), el 'Institute for New Economic Thinking' formó recientemente un grupo de trabajo de economistas europeos, incluyendo a tres de los miembros del Consejo de Asesores Económicos o "comité de sabios" alemán del que su "Manifiesto de los 17" (...) muestra que el acuerdo necesario es posible. La clave para lograr un acuerdo es separar lo que hace falta urgentemente para solucionar la crisis actual, que sí requiere medidas excepcionales (incluida la intervención del ECB), de un sistema institucional a medio plazo que ponga controles y ceda soberanía para asegurar que esto “no va a volver a pasar”. Y es crucial asegurar a los acreedores que lo urgente no se va a convertir en permanente, es decir, que el sistema diseñado no tendrá transferencias permanentes de Norte a Sur. Sí debería haber, sugerimos en el documento, una asunción parcial de deuda conjunta, pero solo la pasada, no la futura: no puede haber responsabilidad común por el endeudamiento hacia el futuro. Y sí, puede haber instrumentos conjuntos de préstamo, pero sin responsabilidad común. Los ESBies, que hemos explicado con Tano Santos ya, pueden servir para ello.

Pero toda esta construcción europea no basta: también la economía española necesita un 'ordnung', más allá de cualquier abaratamiento de la financiación que es, sin duda, necesario. Muchos en España imaginan equivocadamente que España es demasiado importante para caer y que al final nos 'rescatan' en cualquier caso. Pero, como mostró el primer 'rescate', no somos tan importantes como pensamos; sin duda no lo suficiente como para hacer que Alemania subvierta los principios fundacionales de la República Federal. Alemania no puede ni quiere defender un sistema sin 'ordnung', un sistema caótico y desordenado basado en los rescates continuos.


Hasta hace poco tiempo —quizás meses, quizás un par de años— España era vista en Alemania y Holanda como un triunfo de Europa. En los últimos meses, la opinión pública está cambiando con rapidez. “Son como Grecia...”, es el rumor que crece y que se empieza a hacer imparable. Desde la visión del norte, España no es de fiar. Sus promesas no son creíbles, “se sientan a esperar a que el BCE los rescate de sus problemas”. Por eso, en la visión alemana, se ha acabado el momento de las promesas y hay que sustituirlo por el de los hechos y las instituciones. Un ejemplo doloroso: recuerden que no se firmó el memorándum con el Eurogrupo hasta el 20 de julio, solo después de que España aprobara en Consejo de Ministros (el 13 de julio) la subida del IVA. Las promesas no bastan. Otro ejemplo: en el debate del domingo pasado en Holanda, los líderes políticos compitieron por asegurar que ni un duro más iría para “España y Grecia”. El populista Geert Wilders consiguió un rotundo aplauso cuando se preguntó "...por qué la sanidad en Holanda tendría que ser aún más cara para que los españoles pudieren seguir teniendo una sanidad gratuita..."

Es obvio adónde conduce esta pérdida de credibilidad. La única alternativa, que se oye cada vez más en círculos alemanes, es reducir perímetro del Euro, uno nuevo con menos países en problemas, para tener un Euro ordenado que pueda ser rescatado. España corre un alto riesgo de quedarse fuera de este Euro rediseñado. En los próximos meses continuaremos viendo las consecuencias de la visión alemana del 'Ordnung'. A Grecia no se la va a 'rescatar' más, y con muy alta probabilidad, va a salir del Euro antes de fin de año. Si esta salida se produce, va a haber una ventana de oportunidad para que España sea rescatada de forma definitiva, una vez que la canciller Merkel haya mostrado que nadie está aprovechándose de Alemania.

España debe demostrar que puede poner su casa en orden, que puede tomar las medidas necesarias, no chapuzas a corto plazo del 'hoy quito deducción por vivienda, mañana la pongo', 'hoy subo el impuesto sobre la renta por 2 años y reniego del IVA que subo luego', 'hoy uso 40.000 millones que tenía para rescate financiero en rescatar al Estado', 'hoy intervengo a Bankia… ¡ah, no, perdón, si no tengo dinero!' No. España debe usar esa ventana para conseguir un acuerdo que asegure la financiación, la estabilidad y el orden en la economía española. Sí, "Ordnung muss zein" (tiene que haber un sistema ordenado) también en España. En particular, un sistema de ordenación territorial sostenible y racional (no necesariamente más centralizado) sin el que España no es viable. Y "la alternativa..." solo "es volver a la España de los 50...", como en el pasado con Jesús Fernández-Villaverde habíamos escrito.'

En cuanto a lo muy fácil mas -¡todavía!- pendiente, véase como se nos recuerda 'EL ESCÁNDALO DE 50.000 COCHES OFICIALES: Lo primero que hizo David Cameron al llegar a 'Downing Street' fue suprimir los 'automóviles oficiales' individuales, incluso para los ministros. Algunos esperaban que Rajoy hiciera lo mismo pero el presidente ha preferido aumentar el IVA a la cultura antes que exigir de la clase política una discreta austeridad.

Tal vez a nuestro compañero Gonzalo Suárez se le ocurra hacer un reportaje de investigación contándonos de cuántos automóviles disponen los políticos, que -con sus choferes, escoltas, gastos de gasolina, reparaciones, mantenimiento, seguros y amortización- debemos pagar entre todos los españoles, teniendo en cuenta, además, que los coches de los partidos políticos y los sindicatos son de hecho oficiales, puesto que el 90% de lo que gastan esas instituciones proviene de subvenciones directas o indirectas del Estado.

A pesar de la opacidad de las informaciones, a pesar de las veladuras que la clase política y la casta sindical han extendido sobre los automóviles oficiales, se puede afirmar que los coches de las cuatro Administraciones -la central, la autonómica, la provincial y la municipal- sumados a los de las empresas públicas, partidos políticos y sindicatos, superan la cifra escandalosa de 50.000. Pagan y pagan los ciudadanos, sangrados por impuestos (...) pero los políticos continúan desplazándose en automóviles que despilfarran el dinero de todos; no sólo ya por ministros, incluso a concejales de pueblos con pocos miles de vecinos han adjudicado coches oficiales para su disfrute particular.

Por poner algunos ejemplos concretos recientes, los diez consejeros del gobierno anterior de Aragón disponían de 75 automóviles. Feijóo se encontró al arribar a la silla 'curul' de Galicia que su antecesor se adornaba con tres coches blindados a 500.000 euros la pieza. La presidenta Cospedal se vio obligada a hacer una subasta de los automóviles acumulados por la Junta socialista porque no cabían ya en los garajes de la Comunidad castellano-manchega. Soledad Becerril acaba de reducir, de 6 a 3, el número de coches del Defensor del Pueblo. ¿Y por qué todavía 3? ¿Por qué no reducirlos a cero?

A nadie se escapa que el gasto desmesurado de la orgía de automóviles oficiales se multiplica si a él se suma la gasolina, el mantenimiento, el seguro y las reparaciones. El ciudadano medio tiene conciencia de los abusos de infinidad de talleres cuando a ellos se acude para arreglar una avería. La vigilancia del particular es grande para evitar que le timen. Y aún así los abusos se producen. No sé si nos hacemos una idea de cuantísimo facturarán ciertos talleres por la reparación de los coches oficiales.

Y falta aún por sumar otro capítulo: los choferes. ¿Cuántos millares de conductores atienden a los más de 50.0000 coches oficiales, de las cuatro Administraciones, las empresas públicas, los sindicatos y los partidos políticos? ¿Cuánto es lo que hoy le sigue costando al contribuyente... atender los sueldos, las vacaciones, las enfermedades, los trienios, los 'moscosos' y las jubilaciones de esos millares de choferes?

Mientras el primer ministro Cameron suprime los automóviles oficiales para todos los cargos, el SUP ha denunciado que cada ministro español dispone hasta de cinco vehículos de alta cilindrada y blindados. Solo la Administración Central pagará este año 1,5 millones de euros por la gasolina necesaria para atender a los coches de los ministros y altos cargos de Mariano Rajoy. El escándalo es mayúsculo. Pero la clase política lo pasa por alto escondiendo la cabeza como el avestruz. El 'think tank' que asesora a Rajoy debería reflexionar que determinados recortes sociales solo son soportables para la opinión pública si se pone coto a los abusos de la clase política. El ejemplo de Cameron debería ser imitado. Y que se terminen las caravanas de automóviles, choferes y gastos que hoy escandalizan al ciudadano medio, desangrado por los impuestos e impotente para desembarazarse de tanto abuso, tanto cinismo y tanta tropelía.'
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5 comentarios:

  1. Nos conviene cuanto antes echar cuentas, claro... por ejemplo de qué le ocurre a una 'rescatada' Grecia= ver http://www.meneame.net/story/luces-apagan-atenas

    Salud y ánimo,
    L. FER...RO...

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  2. .

    De los PPSOERCIUPD no hay ná más que decir.

    'El 15M dirá GO HOME cuando llegue a Merkel'.

    Bueno, ¿y qué?, vaya: ¡ESTO YE LO KE... AY!!

    .

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  3. De acuerdo en denunciar ese consenso -'unico posible'- entre dichos beneficiarios, de la 'clase política', partidistas:

    - PP
    --- PSOE
    --------- ERC
    ------------- CC
    --------------- CIU
    ----------------- IU
    ------------------ UPYD
    ---------------------- Y DE... MÁS...

    .

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  4. En estos tiempos iracundos de dureza humana, en los que hay que hacer un esfuerzo por mantener fe en la humanidad, os envío este maravilloso y esperanzador poema de L. Cernuda que me ha gustado tanto y -por si no lo conocíais- quiero compartirlo con vosotros:


    [ 1936

    Recuérdalo tú y recuérdalo a otros,
    cuando asqueados de la bajeza humana,
    cuando iracundos de la dureza humana:
    Este hombre solo, este acto solo, esta fe sola.
    Recuérdalo tú y recuérdalo a otros.

    En 1961 y en ciudad extraña,
    más de un cuarto de siglo
    después. Trivial la circunstancia,
    forzado tú a pública lectura,
    por ella con aquel hombre conversaste:
    Un antiguo soldado
    en la Brigada Lincoln.

    Veinticinco años hace, este hombre,
    sin conocer tu tierra, para él lejana
    y extraña toda, escogió ir a ella
    y en ella, si la ocasión llegaba, decidió apostar su vida,
    juzgando que la causa allá puesta al tablero
    entonces, digna era
    de luchar por la fe que su vida llenaba.

    Que aquella causa aparezca perdida,
    nada importa;
    Que tantos otros, pretendiendo fe en ella
    sólo atendieran a ellos mismos,
    importa menos.
    Lo que importa y nos basta es la fe de uno.

    Por eso otra vez hoy la causa te aparece
    como en aquellos días:
    noble y tan digna de luchar por ella.
    Y su fe, la fe aquella, él la ha mantenido
    a través de los años, la derrota,
    cuando todo parece traicionarla.
    Mas esa fe, te dices, es lo que sólo importa.

    Gracias, compañero, gracias
    por el ejemplo. Gracias por que me dices
    que el hombre es noble.
    Nada importa que tan pocos lo sean:
    Uno, uno tan sólo basta
    como testigo irrefutable
    de toda la nobleza humana.]


    Un abrazo fuerte,
    Esperanza Calvo

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  5. AUTONOMÍAS y UNIÓN MONETARIA...

    El Gobierno de la Generalitat catalana acordó la semana pasada recurrir al fondo de liquidez autonómica por 5.023 millones de euros. El portavoz del Ejecutivo, Francesc Homs, quiso dejar claro sin embargo que no aceptarían condiciones políticas y añadió que estaban solicitando el dinero de los propios catalanes, “algo que ya es nuestro”. La frase tiene su importancia porque expresa bien a las claras la distorsión jurídica y política en la que se mueven los partidos nacionalistas: lo que es de los catalanes es de la Generalitat.

    Quien solicita ayuda financiera no son los catalanes, sino la Generalitat, que es una de las 3 administraciones públicas que los catalanes, como todos los ciudadanos españoles, tienen. Una de esas administraciones, la Generalitat, es la que pide ayuda a otra, el Estado, que por supuesto es de los catalanes, y de los andaluces y de los madrileños y de los canarios, etc.

    Hay que suponer además que, tal como están las cosas, esos recursos canalizados mediante el fondo de liquidez no sean ni de los catalanes ni de los extremeños ni de los castellanos manchegos (ya que el descenso de recaudación no constituye exclusivamente un problema de la Generalitat; también y principalmente de la Administración central), sino que provengan de préstamos, préstamos que los mercados y los bancos ya no conceden a las Comunidades Autónomas; únicamente, y no se sabe por cuánto tiempo, al Estado y a algún organismo como Loterías.

    Tampoco estuvo muy acertado el portavoz de la Generalitat en su concepción de Europa cuando contrapuso el fondo de liquidez autonómico con los créditos europeos, al afirmar que “en cambio, los recursos que puede recibir España se nutren de la aportación de otros contribuyentes europeos”. De otros contribuyentes y también de los españoles. Cada país aporta en proporción a su PIB. Los recursos, en contra de lo que algunos piensan y parece que Homs también, no provienen exclusivamente de Alemania. Este país en términos relativos no ha puesto un solo euro más que España o que Italia. Y lo mismo cabe decir de las operaciones del BCE. Aunque no lo parezca, es el banco central de todos los países de la Eurozona.

    Pero es que, por otra parte, Alemania no es la pagana, sino la beneficiaria y receptora de fondos. En primer lugar, porque, gracias a tener atados de pies y manos a los otros países, se está financiando a un tipo privilegiado, que tiene como contrapartida las altas tasas de interés que los demás tienen que soportar. En segundo lugar y principalmente, porque, al mantenerse fijo el tipo de cambio, la economía alemana gana competitividad mientras que las del resto de los países la pierden.

    El mantenimiento del mismo tipo de cambio entre Alemania y el resto de los países empobrece a estos y enriquece a aquella; genera un enorme superávit en la balanza de pagos del país germánico mientras que en las de las otras naciones se genera un déficit insostenible. Se crea empleo en Alemania y se destruye en los demás países miembros.

    Por eso, una unión monetaria no tiene sentido y está abocada al fracaso sin una unión fiscal, unión fiscal verdadera, que no se reduce a un mero pacto sobre el déficit público, como pretenden vendernos en Europa. Por eso también es tan grave que en estos momentos ciertos partidos pretendan romper la unión fiscal de España; aunque a decir verdad ya la rompió nuestra Constitución cuando mantuvo el sistema privilegiado del concierto vasco y navarro. Resulta irritante la postura un tanto cínica del consejero de Hacienda del País Vasco, al afirmar que “él no pide dinero, sino que a él se lo piden”.

    La imposición fiscal no es un asunto de solidaridad, sino de justicia. Si los catalanes o los madrileños contribuyen más por término medio, es porque también por término medio son más ricos que los habitantes de otras Comunidades. Y si reciben del sector público menos, es por el mismo motivo.

    Juan F. Martín Seco

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